- Entonces te llamas _______, eh?
- Hem...sss...si
Ella era la primera persona que me dirigía la palaba desde mi llegada al nuevo instituto. Hacía un mes que había empezado, y podría decir con seguridad que nadie sabía de mi existencia. Yo me limitaba a sentarme en la esquina de la clase y a no hacer ningún tipo de comentario.
- Sabes, eres simpática. Yo me llamo Caroline, pero por favor no me llames así, odio mi nombre... Puedes llamarme Lyne.
- Si..si..
Entonces me tendió la mano y enlazó su dedo meñique con el mío.
- A partir de ahora somos amigas para siempre
Después de lo ocurrido me guiñó un ojo y se fue. Yo estaba perpleja, nunca nadie quería ser mi amiga.