Adam Levine era el típico adolescente deseado por las chicas, y eso parece no cambiar ya que ahora es un adulto y tiene mujeres a sobrar que lo desean. Adam trabaja como mesero en un bar de Hollywood, junto a su amigo Sammy y Blake, con quienes tuvo una conexión inmediata al entrar a aquel bar buscando trabajo. Adam parecía llevar esa vida perfecta que todos desean, pero se veía muy presionado por su familia, era el único de la familia Levine en estar soltero, sus padres siempre le decían que debía elegir a una de tantas mujeres que enloquecian por el, pero,¿Por que casarte con alguien que tú no quieres? O simplemente, aún nadie captaba su atencion. A pesar de sus 35 años, Adam puede ser muy infantil con su toque tan inmaduro que te enloquece, pero sin embargo, eso no quita su seriedad y madurez, y un poco de esa picardía que sus ojos y cuerpo desea cualquier chica, y sobre todo, sus tatuajes, un amante de los tatuajes, totalmente tatuado por todo su abdomen, brazos y espalda. -Creo que me enamore de ella...Ella es la chica que estuve esperando...