Daran no sabe exactamente qué estaba pensando cuando accedió a ir a esa respetable y reconocida agencia. Además de maldita. SM Entertaiment, para ser exactos.
- ¡Vamos Daran! -Chilla Sunny, su famosa y simpática mejor amiga -si la empresa solicita una niñera, creo yo debe ser por algo. ¡Tienes que aceptarlo!
-Y porque me lo estas pidiendo a mí -eso es exactamente lo que Daran no puede entender.
-Porque emanas confianza, y además mi tío me pidió absoluta discreción. -Le dice Sunny -Nadie en la agencia sabe de esto. Otro escándalo, es lo último que compañia necesita.
-Y...
-No es para cualquiera -suelta Sunny, y su amiga no ve cuando la rubia de pelo corto salta hacia ella, colgándosele de los hombros. -Es Exo, sabes lo que eso siquiera significa.
¡NO! Ella no sabe que significa. Lo único que sabe es que sin siquiera pensarlo, ella acaba de aceptarle a Sunny, una total y absoluta locura, de la que nada, absolutamente nada puede salir bien.
Pero una vez que pone un pie dentro de esa lujosa oficina y se encuentra parada delante de esos chicos, y aun cuando en su cabeza cruza la idea de negarse... unos cuantos segundos, pueden hacerla cambiar de parecer. ¡No! No puede entender porque lo hace. ¿O tal vez si?
Si, quizás, si lo sabe. Lo sabe, porque a los pocos quizás segundos de estar dentro de ese punto de reunión, una carita con ojos dulzones y mejillas regordetas, cautivo su corazón en el momento en que su mirada se posó en aquella mirada tierna. ¡Y no! No es D.O, o Suho, o Xiumin, ni Lay y muchos menos Baekhyun.
Daran no tuvo que esperar una pregunta, ni ella dar una respuesta. Porque si, ella estaba ahí, dispuesta a ser esa Niñera...
♣No Copias y/o Adaptaciones.