Lo miraba con esos ojos que parecían angélicales, él suspiraba nuevamente y lo perdonaba.
Harry styles; Era el chico más rudo de la escuela, con problemas, adicciones, pero irresistiblemente sexy, era capitán del equipo de rugby, y tenía una sonrisa que enamoraba a cualquiera.
Louis Tomlinson; Él era perfecto, el novio perfecto. Bueno, detallista, con altas calificaciones y el líder de la clase. A decir verdad, la popularidad del ojiazul se debió gracias al noviazgo obtenido con el rizado. Era deseado por cada uno de sus compañeros, pero sólo tenía un único defecto, enamorarse de personas equivocadas.
Con sólo una mirada hacía que el mayor cayera rendido a sus pies, cediendo ante él, a sus gritos, a sus golpes, a sus agresiones y a sus abusos.
¿Es qué acaso Louis pensaría abrir los ojos alguna vez? ¿Cuándo se daría cuenta que no era amor, y quizá obsesión?