La Despedida

Cuando eres pequeño -cuando tu única preocupación es pintar sin salirse de los márgenes- nadie te prepara para la vida que te espera, nadie te dice que tienes que tomar decisiones.
Cuando tenía 6 años mi madre me hizo elegir entre unos zapatos amarillos u otros rosados, en ese momento pensé que era la elección más difícil que podría tener mi vida.
Pero ahora con 17 años me doy cuenta que eso era algo ridiculo comparado con lo que tengo que enfrentar ahora, decidir que quiero hacer en mi futuro.
Es horrible pensar que con sólo 17 años tenga que planear mi vida entera.
Y nadie me dijo que sería tan difícil.