Modo Stories

Book 2 of Road to Redline It has been two years after the events of the Speed Master Competition that was held in the region of Boise, Idaho, and the Biker Mice have gone back home to Mars. Manuel is unsure if he will ever see them again, which saddens him as he arrives in Japan on a vacation trip to see his friend and fellow racer, Takumi Fujiwara for a few months. Unknown to him, the Biker Mice are closer than he thinks and need his help now more than ever. Kaido Kirafuda, Yuya's father, has captured them after they recovered Stoker and the blueprints of a device that can save Mars and it's inhabitants: The Regenerator! Manuel, Takumi, and their friends are drawn into a deadly plan for revenge that Kaido has cooked up! The mad father of Yuya will not stop until he has destroyed Manuel's reputation and taken his title. His plan: To use the captured Biker Mice and Charley Davidson to force Manuel and his V8 Cammer-powered Ford into a deadly all-or-nothing outrun race on the Shutoku Expressway, otherwise known as The Wangan! Now Manuel will have to call upon all his skill and courage to win, along with trusting his fate to two people he barely knows: Akio Asakura, the driver of the Devil Z, and the Devil's tuner himself, Kitami Jun! Biker Mice From Mars (C) Rick Ungar Initial D (C) Suichi Shigeno Wangan Mindight (C) Michiharu Kusunoki Text (C) Fire_Drifter (M. C) 2015

An exploration of how the Biker Mice work together as a family shall we say. I do not own any of the characters, except the ones I created.

El interruptor emocional: modo defensa o modo creativo Nuestro desempeño (alto o bajo) depende de las emociones, que son sustancias químicas en sangre (hormonas). Por ejemplo, la sustancia del enojo pone al cuerpo en modo defensa. Bajo esta emoción, como vimos, es biológicamente imposible dormir, estudiar o comer, porque tu cuerpo está preparado para la defensa. Esto no es nada nuevo, ya a principios del siglo XX un fisiólogo llamado Walter Cannon estudió este tipo de respuesta de emergencia y acuñó el nombre de "reacción de lucha o huida". A nivel biológico se activa una parte del sistema nervioso autónomo llamado sistema simpático, cuya función es preparar al organismo para una emergencia, es decir para defenderse de amenazas. En resumidas cuentas: las emociones displacenteras activan el sistema simpático que nos prepara para defendernos o huir. En contraste, estas conductas adaptativas (dormir, estudiar, comer, comprender, recordar, estar creativo, atento, etc.) serán biológicamente posibles cuando exista una equilibrada activación de la contraparte del sistema nervioso autónomo: el sistema parasimpático. El funcionamiento del parasimpático se activa con emociones placenteras de vivenciar y regula y activa los sistemas digestivo, inmunológico y sexual, además del sueño, la creatividad, la memoria, la inteligencia, la reconstitución celular, etc. El parasimpático te habilita para que duermas y descanses, estés creativo, te relajes, asimiles los nutrientes de las comidas, se regeneren células, rías, disfrutes, se active el sistema inmunológico, estés atento, etc. De modo que cada emoción, al activar y desactivar sistemas biológicos, te pone bajo un dominio de acción: modo creativo o modo defensa, que traen aparejado un alto y bajo desempeño, respectivamente. Ante una situación de emergencia, el modo defensa es definitivamente adaptativo, mientras que para la vida con sus desafíos cotidianos del siglo XXI, el modo creativo es