¿Por qué escribo?
Cuando uno hace algo, algo que ama, que le llena cada rincón de su corazón, debe preguntarse porque lo hace. Yo no fui la que le dio voz a esta pregunta, fue una persona que poco a poco se iba colando en mi vida como tantas otras. De primeras me sonó absurda, para mí escribir es como respirar, es como si te preguntarán, por qué duermes. Crear historias era algo que hacía siempre, cuando jugaba, cuando me disfrazaba, no se cuando empecé a hacerlo. Para mi todo tenía una historia, cada objeto que me rodeaba contaba algo, como las cicatrices. Nunca pensé que se me diera bien, ni que fuera algo diferente, pensaba que todos tenían esa facilidad para crear cuentos, anécdotas, historias, al punto de que llegaran a creer que era verdad. Con el tiempo, fue transformándose en algo más, en una necesidad. Las palabras me abrazan cuando las pongo o digo, se unen y cobran vida, escribir para mi es la capacidad de plasmar todo lo que soy sin ser juzgada, porque solo es un personaje, un conjunto de letras que cuentan algo inexistente, solo eso.