— Hablala tú.
— Me da miedo.
— Es literalmente una cabeza más bajita que tú.
— Pero da miedo.
— A mí no me da miedo.
— Entonces habla tú con ella.
— Me da vergüenza.
Boyoung llevaba escuchando la conversación todo el rato, y no pudo evitar reír ante lo dicho por Jimin. Parecía que ninguno se había dado cuenta que sus cascos estaban conectados al aire, porque el cable colgaba y les lanzaba miradas cada cierto rato.
— ¿Qué ocurre?– se quitó los cascos, dejándolos en la mesa y mirándolos. Jimin se sonrojó, Taehyung sonrió para disimular y Hoseok se hizo el loco.
— ¿Q-Quieres cambiar de litera conmigo?– balbuceo Jimin–. D-Digo, sólo si quieres.
— Sin problema – se encogió de hombros, levantándose del sofá y yendo directamente a la habitación del piso cutre en el que residían los ocho. No podía quejarse, antes compartida cuarto con su hermana menor, la cual era como un grano en el trasero a pesar de su corta edad. Al menos ellos no la tiraban del pelo para despertarla–. ¿Qué ocurre con vuestras literas?
— Jungkook se levanta por la noche y a veces me mueve – explicó Taehyung–. Jimin prefiere la litera de abajo y Hoseok a veces no duerme por los ronquidos de Namjoon.
— Ah, okay – no preguntó más. Eran motivos suficientes para hacer cambios para estar todos más cómodos. Ella tenía el sueño pesado y no se levantaba por la noche, por lo que el maknae no la despertaría, tampoco los ronquidos, ni molestaría a alguien más. Cambió su almohada de sitio, al igual que su único peluche, regalo de su hermano Bomin, y sonrió–. Toda vuestra, espero que ahora todos podamos dormir mejor.
Salió del cuarto escuchándolos cuchichear de nuevo, y fue al salón. Si el reloj no tenía mal puesta la hora, pronto YoonGi volvería de su trabajo a medio tiempo, Namjoon de la agencia y Seokjin de hacer la compra semanal. A ella la gustaría también trabajar, pero era menor y los mayores la habían pedido que no lo hiciera, alegando que bastante hacía ya preparando el debut, ayudando en la casa y dándoles dinero que enviaban sus padres para hacer la compra.
Justo a tiempo, escuchó la puerta abrirse, y apareció YoonGi. Como la mayoría de los días, el chico traía un gesto de cansancio, los hombros caídos y una bolsa con algo que compraba de camino con la propina que le daban. Boyoung estaba orgullosa de él, no le conocía del todo ya que era algo reservado, pero le había escuchado rapear, además de haber leído sus letras. Era alguien increíble, aunque tal vez él no lo supiera aún.
— Bienvenido — saludó, acercándose para coger ella la bolsa, descubriendo que eran paquetes de ramen–. Uh, estos son mis favoritos, gracias por comprar ramen, oppa.
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«BOYOUNG; SE BTS» #5
Fanfiction«-Soy Choi Boyoung, y me comeré el mundo aunque te duela.» Para la industria musical se necesita talento, pero una pizca de carácter te ayudará un poco. Amor, música, algunas locuras y siete chicos con una misma meta. ¦ Créditos a @w-witchriddle por...