Deseo oculto - Volkway (Oneshot) (+18)

Capítulo 1

No entiendo por qué la gente le tiene tanto miedo a este hombre. Impone, si, pero tampoco creo que sea para tanto. De hecho, es agradable cuando lo conoces, cosa que cuesta mucho. Pero sigo sin entender a esas personas que se apartan en cuanto lo ven aparecer. Yo, al verlo pasar, no hago otra cosa que acercarme más a él.

- Volkov, me estás escuchando?

- ¿Eh? Si si, claro que lo estoy escuchando Conway.

- Y una mierda. Estabas metido en tu mundo y yo aquí, hablando solo como un gilipollas.

- Que no hombre, que lo estaba escuchando.

- ¿Ah sí? Entonces cuéntame, ¿de qué te estaba hablando?

Aquella pregunta había pillado desprevenido al ruso. Había estado tan sumido en sus pensamientos y en la borrachera que no había escuchado ni una sola palabra que había pronunciado el mayor.

Mierda. ¿Qué cojones le digo yo ahora? ¿Qué estaba pensando en él?

- Pues... Me estaba hablando sobre... Sobre...

- Sigue. Te estoy escuchando.

- Eeeeh... Lo siento Conway. Sinceramente, no lo estaba escuchando. Creo que el alcohol me está empezando a afectar.

- Por lo que veo si. El alcohol ha afectado hasta en tu sentido auditivo. Pero dejémonos de gilipolleces. Sacame otra.

- ¿Otra? Al final va a terminar tan borracho que se quedará dormido en el sofá de mi casa.

- Más quisieras tú capullo.

Cuanta razón llevas en eso. Quisiera más de ti...

Se encontraban sentados en el blanco y gran sofá de la casa del comisario mientras bebían y hablaban. Habían decidido que aquella noche necesitaban despejar sus mentes de tanto trabajo y la idea de ir a casa del comisario a beber como dos adolescentes que acababan de descubrir el alcohol les pareció maravilloso.

Era aproximadamente la 01:00 de la madrugada y ninguno de ellos tenía en mente dejar de beber.

Entre los dos, habían logrado terminar una botella de Vodka y media de una de Brandy, y, a aquellas alturas de la noche, la cosa comenzaba a ponerse interesante.

- Claro que me masturbo capullo. ¿Qué te pensabas? ¿Que por ser una persona mayor no tengo ganas?

- No, no. Solo digo que me extraña. No imaginaba que usted todavía tuviese ganas de hacer... Esas cosas...

- Tengo la energía de un chaval de 20 años aunque no te lo creas.

Si te apetece puedes demostrarme que no estás mintiendo. A mi, me apetece mucho que me hagas una demostración.

- Usted siempre tiene las pilas bien cargadas. Es cómo un Terminator. Incluso parece que para el sexo tambien lo es. Me gusta.

- ¿Cómo que te gusta? ¿Qué coño dices?

Eso Viktor. ¿Qué coño dices? A ver cómo sales de esta, porque de esa mirada que te escruta no te escapas ni queriendo...

- Pues... Quería decir que...

Se sentía avergonzado por aquellas palabras que le había dicho a su superior. «Me gusta que sea un Terminator del sexo, así, podremos pasar la noche revolcandonos entre las sabanas, eso es lo que quería decir». Le gustaría poder decirle aquellas palabras, pero sentía demasiada vergüenza de hacer aquella declaración.

Sus manos habían comenzado a sudar y movía la mirada de un lado a otro en busca de una respuesta o una buena excusa que pudiera ayudarle a salir de esa incómoda situación, pero la mirada del superintendente seguía sobre él. Atento. Escrutador. Dominante.