9Dazai

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El demonio de las cenizas

Especial Halloween

Presente:

-tn-saludo sorprendido mientras se paraba junto al niño de cabello rubio que me noqueo con la señal de tránsito.
-Osamu-salude coqueto-ni cruzando los diversos infiernos podría llegar a creer que te encontraría en este lugar-comente aún sonriendo.
-Que haces aquí?-pregunte preocupado.
-Se cre to-respondi aun sonriendo-Pero bueno, creo que mi hora ah llegado, así que, hasta la próxima- me despedí chasqueando los dedos de mi mano izquierda.

-Desaparecio!-comento Atsushi kun.
-No, se convirtió en cenizas-corrigio Kunikida san, tomando las dichas cenizas en una bolsa plástica.
-ohhh es un mago!-chillo Keji viendo la escena junto a mi.
-Pero, él saludo a Dazai san, lo conoce?-prunto viéndome.
-Si, en mi tiempo en la port mafia nos topamos una o dos veces, pero es el mismo demonio, así que no me quise involucrar mucho con él-menti en la última parte mientras me giraba.
-Vas a ir a buscarlo?-pregunto kunikida.
-Que!? No acabas de oir lo que dije!?-pregunte asombrado-Claro que no iré a buscarlo, él es el único capas de matarme-respondi molesto.
-Pero, usted no quiere morir?-pregunto Atsushi kun.
- y de una manera cruel y dolora, yo no quiero eso-aclare bufando.

-Ya comenzaste a buscarme? Podríamos jugar al gato y al ratón-hablo desde el callejón vecino al del bar Lupin.
-Meh, no tengo nada mejor que hacer-respondi comenzando a adentrarme en el callejón.
-Hum, me extrañaste?-pregunto en tono tierno mientras saltaba desde arriba de uno de los balcones.
-En realidad no, pero, puedo preguntar que haces aquí?-pregunte sin interés.
-Bueno, como sabes mi poder tiene límites y costos, hace unos años alguien asesino a otro alguin y luego fue asesinado, como mato a alguien y dejo morir a varios, lo debía venir a buscar, pero vi a cierta persona cerca de ese alguien y no pude hacerlo, por lo cual me quedé sin mi poder durante varios días, ya que un estúpido Angel se lo llevo, ahora mi poder está un poco debilitado y necesito ayuda de alguien para aumentarlo-explico sonriendo.
- No es lo que pienso, o si?-pregunte viendo al suelo.
-Si lo que piensas es que, volví a esta inmunda ciudad buscando ayuda del ¡Gran Osamu, prodigio de la muerte y los pecados!- grito lanzándose de arriba de una de las azoteas y caer de espaldas contra el asfalto del callejón-esta en lo correcto-agrego sonriendo mientras la sangre volvía a su cuerpo.
-Tu manera de no poder morir me hace recordar a la mia-comente negando con la cabeza.
-Pero tu si puedes morir, un arma, un veneno, un animal, cualquier cosa o ser puede hacerlo, mientras no sea mediante una habilidad, yo puedo matarte y llevarte al mismo infierno para gobernar a mi lado-ofrecio tendiendome su mano, la mire unos segundos y negué con la cabeza-Tsk, como quieras-agrego molesto guardandola en el bolsillo de su saco.
-Ya no soy parte de la port mafia y hace más de 4 años que no mató a alguien, no pienso volver a hacerlo-aclare serio.
- Lo se, lo supe cuando me viste en tu amada agencia hace unas horas, pero sabes que nada puede anular mi poder y que tampoco puedo morir, estoy condenado a ir por la vida recolectando almas pecadores y matando a los culpables de tentar gente!-chillo sonriendo.
- No puedes matar gente buena-ordene aún serio.
-Tu, mi querido Osamu, no estás en condiciones de ordenarme nada, ni siquiera de rogarme con la frente 6 metros bajo el suelo, hice algo por ti, que nunca podrás acabar de pagarme-explico pegandome con su dedo índice en mi nariz.
-Se que me salvaste la vida, pero eso ya creo habérselo pagado con mis años trabajando en la port mafia-comente confundido.
-oh No mi querido Osamu, recuerda la historia que te conté en el inicio de eso charla?-pregunto sonriendo-Quien crees que eran los protagonistas? Un joven de cabello castaño apagado con vendas y un hombre un poco mayor con cabello rojizo, quizás?-pregunto riendo levemente.
-Que hiciste con el cuerpo de Oda!?-pregunte molesto.
-Na da! Por eso estuve sin poderes unos dias, su vida tenía un muy buen precio en el cielo, "El hombre de la mafia que podía subir de puesto como si con nada de esfuerzo se tratase, que se negaba a matar y rescataba huerfanos", un título honorable y tan inspirador-explico fingiendo limpiar lágrimas de sus mejillas- y también "el hombre que permitió miles de muertes, tanto de personas corrientes como de los padres de los niños que él luego rescataba, que se negaba a matar por un sueño egoísta de ser escritor, pero que, finalmente mató a alguien antes de morir" su cabeza valía una fortuna tanto en el cielo como en el infierno, pero sabes que el dinero de los Ángeles me afecta en negativo, ya que me hace quedarme más tiempo en esta realidad, aún así, cuando te vi correr a él y su momento tan emotivo-dejo su oracion en el aire.
-no pudiste llevartelo y se lo dejaste a un angel-finalice suspirando.
-Ding Ding! Bingo! Tenemos a un ganador!-respondio riendo en el suelo-Lo mejor de todo, es que, aún así pude llevarme el alma de todos los que murieron esa fecha, menos la de ese hombre-agrego levantándose del suelo.
-Entonces, te irás? Porque yo no pienso ayudarte-afirme serio.
- Por más que quiera y créeme que quiero, no puedo a no ser que tenga 15 muertes en mis bolsillos-respondio dando suaves palmadas en los nombrados.
-Cuantas llevas?-pregunte curioso.
-Comence hoy, así que sólo tengo 8-respondio suspirando- cause un accidente automovilístico con el que pude ganar otras 4, pero el niño rubio me golpeó con una señal de tránsito detrás de la cabeza y no pude tomarlas antes de que parecieran los Ángeles-bufo molesto.
-Solo 8? Que impropio de ti, tn-murmure negando con la cabeza-has ido a hospitales?- Pregunte curioso.
-Sabes que por más que haya ofrecido mi cuerpo y alma al diablo, aún así tengo mis principios-respondio con una mueca de desagrado.
- No hospitales, no asilos, no instituciones mentales, no bebes ni niños menores de 12 años-respondi mientras levantaba un dedo por cada uno.
-Así es, contigo rompí el de los hospitales y la edad, pero tu cabeza en el infierno valía quizás 3 y estoy siendo optimista-aclaro.
-Aun así me "salvaste"-afirme haciendo comillas con los dedos.
-Si, estabas tan desesperado por salir de ese inmundo hospital que no te molesto hacer un trato con el demonio favorito de papi Satán, aun recuerdas el contrato?-pregunto sonriendo.
-Salud a cambio de almas pecadoras-respondi sonriendo-tanta salud que no puedo suicidarme indoloramente-murmure negando con la cabeza lentamente.
-Exacto! Si no fuera porque en tu trabajo aún matas gente "en defensa propia" y "para salvar a los demas" ya habrías estado en agonía sin medicina que pudiera salvarte, ni el poder de esa mujer de "no has de morir" podría haberte salvado-hizo una pausa para sonreir- pero de haberla conocido a los 11 años, tu vida pudo llegar a ser como cualquier otra de un niño de esa edad, en cambio, tuviste que hacer un trato con un demonio y dejar que te haga cortes desde tus muñecas a tu cuello al punto de casi desangrarte para que pueda usar tu sangre y modificarla para que te sirva-acabo de hablar junto a una gran carcajada.
-Y pensar que tu moriste por una neumonía mezclada con la peste negra-comente negando con la cabeza mientras sonreía.
-Fue una mala forma de morir por 15 segundos, aunque al ser un niño que mataba por comida y mató a su propia familia para poder comer mas, fui elegido para ser el Mesías de papi Satán-aclaro antes de suspirar-fue una gran época, muerte y oscuridad por doquier, creo que nunca fui ni seré tan poderosos como en esos tiempos-agrego suspirando nuevamente.
-Así que, te irás o no?-pregunte serio.
-Puede ser que si, puede ser que no, quien sabe-respondio sentado en un balcón.
-Por que estas tan atento a ese balcón?-pregunte curioso.
- La familia que vive ahí morira, todos, incluyendo a los niños-afirmo negando con la cabeza- a la madre se le olvidó la cocina encendida y estuvo perdiendo gas todo este tiempo, si te apresuaras podrás salvar a las dos niñas y al bebé, pero los padres están muertos-ofrecio abriendo la ventana-apurate, no me gusta llevar almas jóvenes al infierno, pero de ser necesario lo haré-recordo riendo.

Bungou Stray Dogs One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora