Capitulo 1

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Cuando deseas a una estrella

Erase una vez una joven y ordinaria muchacha  que vivía felizmente junto a su familia en una  ciudad caótica y ruidosa como cualquier otra  . Por suerte para ellos , de vez en cuando y si el calendario lo permitía , eran capaces de escapar por unos días a la casa rural de su cariñosa abuela quien vivía  rodeada de bosques , ríos , montañas y decenas de animales . Es allí donde Dalia , nuestra querida protagonista , se interesó por la naturaleza que la rodeaba así como por las criaturas que la anciana  de la casa aseguraba que allí vivían . A pesar de las advertencias de su abuela ; la niña de apenas 6 años se entretenía las tardes robando los dulces de la nevera para luego dejarlos cerca de las macetas de la casa como una "ofrenda" a dichos seres. Aunque para su decepción lo único que atrajo fueron  hormigas que terminaban haciendo largas colas para robar algo de esos dulces  .

La pequeña Dalia se consideraba muchas cosas . Aventurera , fuerte , astuta ...pero jamás en la vida se había visto a sí misma como una princesa . Las princesas no corrían descalzas por el campo ni hacían la croqueta tirándose colina abajo , al menos no todas .  Y aun así se las arregló para ser   apodada de tal manera por su  abuela quien no pudo evitar encontrar la semejanza cuando su nieta , jugando con los animales , comenzaba a cantar las melodías que tan repetitivamente escuchaba en las películas de dibujos que veía  . Con el pasar de los años ambas formaron un vínculo inquebrantable entre ellas que parecía no poder llegar a  romperse nunca . Más aún cuando su madre tuvo que empezar a trabajar los veranos en exceso dejándolos a ella y a su hermano Darío semanas enteras en aquella casa . Y con cada visita la mayor satisfizo el deseo de juegos  y conocimiento de su nieta volviéndola una gran e imaginativa conocedora de fábulas y cuentos  .

Pero la vida real no siempre es un cuento de hadas y en ocasiones ni tan larga como esperamos que sea .  el vínculo inquebrantable resultó no ser rival  para algo como la muerte . No era la primera vez que  Dalia perdía  a alguien cercano para ella pero si a alguien tan querido  . Y sin haberse podido despedir e  incapaz de echarle la culpa a nadie , todo aquello derivó en un pesado dolor en su corazón que opacó su usualmente optimista personalidad .

Por si perder a su Nana no fuera suficiente la joven se vio obligada a irse de vacaciones . ¿  Como que obligada ? Os preguntareis . Puede que pasar los días libres con tu familia en uno de los mayores parques de atracciones del mundo suene como las navidades perfectas de cualquiera , pero ciertamente Dalia no estaba con el humor de sentirse alegre . Más bien le era imposible porque se supone que este viaje había sido regalo de su abuela . Para pasarlos junto a ella y recordar las películas que solían ver juntas y sobretodo para pasarlas sin preocupaciones , sin mascarillas que empañaran sus gafas impidiéndole ver el mágico paisaje y desde luego no en mitad de una pandemia mundial . Prácticamente se sentía culpable por estar ahí y todo porque el año había empezado mal , había seguido peor y posiblemente terminaría de forma catastrófica . Pero bueno al menos no habrían " desperdiciado el regalo de su abuela " como bien había dicho su hermano .

Lo que no esperaba ella era que esa noche el año le daría otra sorpresa más y de nuevo se arrepentiría de no haberse despedido .

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Una tiara de brillantes cristales coronó la cabeza castaña de Dalia . Sus ojos marrones le devolvieron la mirada ahora melancólica  desde el espejo debido al recuerdo del apodo de su abuela y de su infancia en aquella casita al norte de Francia.

-Te queda muy bien- comentó una voz aguda a su lado interrumpiendo sus pensamientos - ¡¡ deberías comprarla !! . Te hace parecer una princesa .

Floreciendo Entre Espinas (Twisted Wonderland x OC )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora