La muerte de Xiao Zhan.

Capítulo seis.

—El blanco eras tú... Yibo —dijo Zanjin en un tono burlón con una sonrisa de medio lado. —Aquel estúpido solo tuvo la mala suerte de estar enamorado de ti.

Mi cuerpo se congelo al escuchar que van sobre ti... Yibo.

Saben que vas a caminar después de ir al trabajo y a la universidad... Yibo... Es mi padre, yo no puedo ir a denunciarlo.

—Yo me iba a encargar con la ayuda de Jackson y JiChen, de el deseo de YiZhou... De nuestro deseo —siguió diciendo aquel ya desconocido castaño, era muy confuso todo... Estuvo tanto tiempo con un completo desconocido... Un Zanjin falso, lleno de odio y de rencor hacia él y su familia.

Yo sabía que aquel hombre no le convenía a Zanjin... Cuando supe lo del fraude en la empresa de los Wang lo confirme.

YiZhou ya está preso... Pero Zanjin no, él era el chico que siempre lo acompañaba y con el que huyó.

Ahora que volví a escuchar sus nombres juntos en una oración, fue de los labios de mi padre mientras le decía a Jackson que ellos eran los que iban a pagar por el trabajo.

Hay personas que no se detienen ni estando tras una celda...

—Dime que paso con Zhan... —susurro Yibo —¡Dime que paso! —fruto desesperado tomándolo de los hombros.

Escuche que esta noche irán por
Yibo... Haré cambiar de opinión a mi padre.

Te amo y te amaré siempre, Yibo.

—Zhan... —dudo un poco para después reír.

—Vamos cariño...—hablo YiZhou en un tono burlón —Dile que paso con su eterno amor —continuo en el mismo tono. Yibo tenia ganas de matarlo ahí mismo, de acabar con los cuatro, con los culpables de la muerte de Xiao Zhan. Sintió en su hombro la mano de Hai-Kuan dándole a entender que guardara la calma aunque fuese difícil.

—Él llego corriendo a aquel callejón donde estábamos esperándote —empezó a decir Zanjin sonriente. Disfrutaba el dolor causado al primogénito de Zhao. —Empezó a gritar que no te hiciéramos daño y le rogo a su padre que se alejara de este mundo, ya sabes... —dijo mientras se miraba las uñas como diciendo lo mas normal del mundo —Nosotros. —sonrió con ahora su ya típica sonrisa de medio lado —Cuando él dijo que iba a ir con la policía cuando no cedimos en no lastimarte —dijo con algo se seriedad —No tuvimos mas opción que... —comenzó a reír —Ya debes de saber la historia de lo que paso después ¿no? —pregunto cínico.

—No, Zanjin... No te confundas. Nadie muere porque quiere de esa manera, nadie pide ser asesinado.

—Si... Lo siento...

—¿Como pudieron? —pregunto Yibo. —¡¿Cómo?! —miro ahora a JiChen, el padre de Zhan. Este se encontraba tirándose de los cabellos  mientras lloraba —¡¿Cómo pudiste estar de acuerdo en que asesinaran a tu hijo?! —grito con tanto coraje y resentimiento que le dolió la garganta.