Amor Sobrenatural ( Alucard x Sebastian)

Cap.2: Aroma y fragancia...

Sebastián había salido al patio, había quemado el uniforme que le habían dañado, suspiró frustrado, aquellos dos no tenían remedio y mucho menos ahora juntos.

—Ah... — suspiró frustrado mientras continuaba sus labores.

Alucard estaba aburrido que ni mirar el cielo le parecía entretenido, si su ama no lo hubiera llamado de regreso el estaría feliz en la ciudad. Odiaba tanto estar ahí y más por el hecho de tener que soportar a ese crío llamado Ciel, que en conjunto con Integra eran un maldito dolor de cabeza.

Harto decidió ir a dar un paseo al bosque, al menos así se des estresaría.

Sebastián había terminado de hacer sus deberes, había dejado todo listo, al menos para respirar unos segundos. Resopló ligeramente irritado aunque volvió a aquella expresión sonriente y sería que normalmente tenía, sólo para no levantar sospechas sobre su visible mal humor.

Alucard caminaba por el sendero de tierra tratando de despejar su mente. Odiaba tanto que lo mandaran pero no podía hacer nada. Había jurado lealtad hacia la familia Hellsing y no podía destruir ese lazo así como así. Suspiro con pesadez llegando a un lago grande, ahí se sentó para ver el paisaje, era raro que el rey de los no muertos hiciera tales cosas, tal vez estar tanto tiempo con los humanos le estaba empezando a afectar.

Sebastián había notado aquel aroma, suspiró rodando un poco los ojos y negando mientras tomaba su frente.

—Oh vaya... — murmuró mientras intentaba ignorarlas aquel aroma "muerto viviente" y se mantenía ocupado arreglando el jardín trasero, para después iniciar una caminata por el bosque en busca de algunas cosas.

Alucard veía al frente con seriedad hasta que decidió recostarse sobre el pasto y cerrar los ojos. El viento seguía soplando en todas las direcciones posibles, hasta que, en un momento dado un aroma muy peculiar llego a su nariz, ese de " Demonio mayordomo" Suspiró mientras inclinaba su sombrero hacia adelante cubriendo su cara.

Aquel mayordomo continuaba con su camino claramente ignorando el aroma de aquel rey muerto y evitando el lugar de donde provenía, no quería tener ningún problema o alguna clase de roce con aquel hombre que hacía lo que quería cuando quería.

—Vampiros.. — murmuró de mal humor. Un molesto y curioso desagrado hacía los vampiros empezaba a desarrollarse, eso o, tal vez se trataba de algo más.

Alucard seguíaignorando el aroma del demonio que parecía querer llegar con insistencia a sunariz, se llevó una mano al rostro para apretar un poco su sombrero y no seguir aspirando ese aroma.

Sebastián se había detenido, había tapado su nariz al oler más a Alucard, suspiró un poco pesado mientras se detenía y comenzaba a regresar a la mansión, suponía que sería mejor a tener que estar aguantando esa peste.

Alucard estaba harto de ese aroma que parecía intensificarse más pero estaba terco a no moverse de ahí. No quería regresar y ver el malhumorado rostro de su ama, o simplemente no quería regresar.

El mayordomo había salido del bosque, sujetó su frente por un segundo mientras fruncía suavemente el ceño, parecía apestar a aquel molesto rey muerto y era lo que más le desesperaba. Su ropa se había impregando.

Alucard molesto al seguir sintiendo ese aroma en la nariz abrió los ojos, retiró su sombrero con la intensión de identificar la fuente o el lugar del cual venía, al darse cuenta de que su sombrero era el que olía de esa manera lo lanzo lejos de él.

― Ese demonio ― Murmuró soltando un gruñido, hacía tanto que no se sentía tan molesto.

 Volvió a cerrar los ojos para relajarse, no quería tener nada que ver por el momento con la mansión, bastante estrés tenía como para regresar.