capitulo 21

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Maratón (5/5)
15 semanas.
Cami.
Últimamente he sentido la nariz tapada y se me dificulta respirar y hablar. Los antojos y cambios de humor siguen igual.
Estoy  esperando a que Juli venga de la casa de su mamá para que vayamos a la doctora. Hoy espero que sepamos si esperamos gemelos o mellizos.
- hija. - dijo mi mamá entrando a mi habitación.
- dime. - le respondí.
- recuerda que te tienes colocar ropa cómoda.
- si mamá.
- también te iba a preguntar ¿Donde esta Juli?
- se fue a donde su mamá que la necesitaba, no creo que se demore.
Ella salió y yo me puse la camisa y me fui a la sala. Luego de varios minutos llego.
- hola Clara. - le dijo a mi mamá que estaba en la cocina.
- hola Juli. - le respondió.
Vi que se acercó a mí con una bolsa de regalo y me beso.
- hola mi amor.
- hola mi vida.
- hola hijos. - dijo acercándose a mi estómago y besándolo. - mi mamá te mando algo.
- ay mi suegra es un amor.
Lo destape y era un abrigo y sudadera blanca.
- ay mi amor, mi suegra es un amor.
- bueno mejor vámonos antes de que se nos haga tarde.
Asentí y nos fuimos las tres al médico.
Cuando llegamos fue cuestión de segundos para que nos llamarán, entramos y me hizo las típicas preguntas, luego fuimos a la sala donde me iba hacer la radiografía.
- Loraine, ¿Puedo hacerte una pregunta? - hablo Juli.
- claro Juli, dime. - respondió.
- lo que pasa es que nosotras tenemos un probabilidad de que podamos tener gemelos o mellizos. ¿Cuando vamos a saber eso?
- pues vamos a ver si contamos con la suerte de saber hoy.
Ella comenzó a pasar el transductor emite ondas sobre mi estómago y Juli tomo mi mano.
- al parecer chicas si contamos con la suerte.
- ¿Que son? - dijo emocionada Juli.
- son gemelos. Felicidades.
Vi como Juli comenzó a llorar mientras me sostenía la mano.
16 semanas.
Cami.
Estaba despertandome y justo siento que en mi estómago se siente como unos aleteos de mariposas.
- buenos días mi vida. - dijo Juli entrando a la habitación con el desayuno en las manos. - ¿Como amaneciste?
- bien mi amor ¿Y tu?
- execelente. Me imagino que tienen hambre.
- si y demasiada.
- bueno pues tú mamá me dijo que hacerte.
- gracias mi amor, te amo. - me acerqué a besarla.
Comenzamos a comer mientras veíamos televisión. Cuando terminamos ella acomodo la bandeja y se puso a hablar con nuestros bebés.
- hola. - dijo mientras yo le acariaba la cabeza. - me dijieron que ya me van a poder escuchar así que tengan por seguro que siempre les voy a hablar. Yo soy su otra mamá y aquí entre nos su favorita.
- ¡hey! - hablé golpeandole suavemente la cabeza.
- jaja. ¿Les parece si les digo sus nombres?
En ese momento siento de nuevo esos aleteos de mariposas.
- creo que sí quieren saber, se acaban de mover.
En ese momento vi que se le formó una sonrisa grande.
- bien. Si son niñas se van a llamar Sofía Pérez Esguerra y Sara Pérez Esguerra. Y si son niños se van a llamar Erick Pérez Esguerra y Manuel Pérez Esguerra. Lo que si tienen que saber es que no nos importa si son niños o niñas, igual los vamos a amar y darles las gracias por cambiarnos totalmente nuestra vida. Los amamos.
Por último beso mi estómago y se dirigió a mi y me beso.
- te amo. - le dije.
- yo también mi amor.
3 meses.
Estaba durmiendo cuando de repente siento un calambre en mi pierna derecha.
- ¡Ouch! - dije apenas sentí el calambre.
- ¿Que pasa amor? 
- ¿Que pasa Cami?
Dijeron mi novia y Santi. Mi novia se sentó en la cama y Santi se paró del colchón inflable.
- me dio un calambre.
- duerme Santi yo me encargo.
El volvió a dormir y Juli me acomodo el lugar donde tenía que ponerme cuando me daba un calambre.
- listo princesa. - hablo Juli. - ya puedes seguir durmiendo.
- gracias mi amor.
La bese y seguí durmiendo.
Al otro día.
Estaba despertandome con un hambre.
- al parecer dos personitas se despertaron con hambre. - dije acariciando mi estómago que cada vez esta más grande.
Me levanté de la cama y salí de la habitación a la sala que es donde supondría que estaba mi novia pero no estaba.
- ¡Amor! - grite pero nadie respondió. - ¡Mi vida!
Vi que en la mesa había un plato con desayuno. Cuando termine de comer decido escribirle a Juli para saber dónde está. Le mando el primer mensaje pero no le llega parece como si no tuviera señal.
Decidí sentarme en la sala y ver una película.
Cuando la película iba por la mitad se me vino a la mente un pensamiento. ¿Y si Juli se arrepintió de tener hijos? ¿Y si me abandono? ¿Y si conoció a otra y con ella va a construir su futuro y a mi me va a olvidar? De la nada siento que comienzo a llorar, tal vez esos pensamientos son reales, tal vez se arrepintió de tener hijos conmigo.
Justo en ese momento escucho que abren la puerta.
- hola mi...- era ella. No pudo seguir porque me vio llorando. - princesa hermosa ¿Que pasa? - vi que se arrodilló enfrente mío.
- ¿En...do...donde estabas? - le dije con la voz entre cortada.
- fui a dejar a Santi a su apartamento y justo cuando iba a venir mi papá me llamo dijo que me necesitaba, fui y me guío a donde iba a hacer su nueva casa que aún no tiene internet ni señal por eso no te pude contestar.
- me preocupaste mucho bebé. - la abrace.
- tranquila mi amor.
- pensé que te habías arrepentido de tener hijos conmigo.
- mi princesa hermosa. - dijo separandonos y agarrándome de las mejillas. - yo jamás me voy a arrepentir de tener hijos contigo.
- ¿Me lo prometes?
- te lo juro mi amor.
Me acercó a ella y me beso.
18 semanas.
Estaba acostada viendo televisión esperando a que Juli se terminará de lavarse los dientes para dormir.
- mi amor. - dijo llegando a la habitación.
- dime. - le respondí volteandola a ver.
- mañana vamos a salir, te quiero mostrar algo. - hablo acostandose a mi lado.
- y ¿Me puedes dar una pista?
- solamente te digo que te va a encantar. Bueno eso espero.
- si es un regalo tuyo obviamente me va a encantar.
Me acerqué a besarla y cada vez el beso se hacía un poco más intenso. No me di cuenta cuando ella ya estaba encima de mi.
Vi que se acercó a mí estómago y dijo.
- cuidado con la cabeza hijos.
Al otro día.
Sentía que alguien coloca su mano en mi estómago, me levanto y veo que era la mano de Juli, me volteo y me doy cuenta de que nuestros cuerpos estaban desnudos. Me acerco a ella y la comienzo a besar por toda la cara.
- pueden pasar años y a mi siempre me va a encantar despertarme así. - dijo.
- buenos días mi vida. - la bese en la boca.
- buenos días mi princesa hermosa. - acercó su mano a mi estómago y lo comenzó a acariciar. - buenos días hijos, ¿Tienen hambre?
Justo en ese momento siento los aleteos de mariposas.
- si, tienen hambre.
Ella se paró, se vistió y salió a hacerme el desayuno. Yo me paró y comienzo a buscar mi pijama.
Veo a lo lejos que mi camisa está al frente de un espejo un poco lejos de la cama ¿Como llegó ahí?
Salgo de la habitación y veo que Juli está en la cocina, me acerco a ella y la abrazó.
- ¿Te he dicho que te amo? - le dije poniéndome en puntas para besarla en el cachete.
- creo que no. - se volteo, me cargo y me puso sobre el mesón.
- pues te amo mucho. ¿Tu me amas?
- mmm...no.
Reímos y nos besamos.

Mi estupida vecina (G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora