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Según la doctrina católica una persona que muere con pecados leves en su alma, va al purgatorio para ser purificada por el fuego antes de ir al cielo. En la iglesia del sagrado corazón en el barrio de Prati, en Roma, hay un pequeño museo escondido tras un altar lateral, es el museo purgatorio. Este lugar extremadamente aterrador cuenta con exposiciones  que documentan casos de almas del purgatorio que vuelven a la tierra para atormentar a los vivos. Algunos de los objetos que se exhiben son: una mesa con marcas de quemaduras y líneas talladas por una mano del otro mundo, así como huellas dactilares quemadas en ropa y sábanas. El elemento más espantoso es un libro con la huella de una mano humana quemada profundamente en las páginas, la mano de un monje muerto sufriendo los fuegos por algún pecado desconocido

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Datos perturbadores 2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora