LXIII

41 2 0
                                    

Un día aburrido. Uno monótono.

Casi termina el día, tengo sed.

En silencio camino y te veo en la mesa. Solo.

Se me olvidó que tenía sed.

Querría acercarme. Pensaba que estabas solo. Una inmensa alegría vino a mí, tan sólo por dos segundos...

Entonces se esfumó cuando apareció Ella.

Todo lo que vino a mi fue decepción, dolor, no sé.

Sólo sé, que dolió, y mucho.

Silence.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora