Deseo Inmortal

El Deseo

Las personas tienen muchas cosas en mente, tienen deseos que cumplir, metas que lograr, familias que proteger, trabajos que hacer, pero no siempre el tiempo es suficiente para lograr todas esas cosas. Muchos dicen que el tiempo jamás es suficiente para lograr nuestros deseos. Otros dicen que todos tenemos el tiempo suficiente para lograr todo lo que nos proponemos, pero no sabemos apreciar cada segundo que pasa, es por eso que le echamos la culpa al tiempo por no darnos un poco más de sí. La verdad, todos deseamos ser inmortales, tener todo el tiempo del mundo para hacer lo que queramos sin preocuparnos por el hecho de que algún día debemos morir y no tener todo lo que deseamos terminado.

La inmortalidad es un algo ahnelado por cualquiera, porque, ¿Quién no querría ser eterno para siempre? Al ser inmortales no debemos preocuparnos por la edad. Jamás envejeseremos. No debemos preocuparnos al no terminar las cosas pendientes que dejamos de lado por no tener el tiempo suficiente. Tendremos todo el tiempo del mundo para completarlo. No debemos preocuparnos por nuestros estudios o por no haber culminado con el curso que dejamos de lado porque no podíamos hacer tantas cosas a la vez. Tendremos bastante tiempo para aprender. No debemos preocuparnos al no haber bajado de peso el verano pasado. Tenemos la eternidad para adelgazar, engordar, y volver a adelgazar de nuevo si no los proponemos. Al ser inmortales no debemos preocuparnos por nada, el tiempo se vuelve insignificante y una cosa inmaterial que dejará de importarnos con el pasar de los años. Se volverá solo un recuerdo más del resto. Solo un recuerdo más...

Cualquiera mataría por ser inmortal, ese codicioso querer por no morir y ser joven por siempre sin que el tiempo nos arrebate nuestra hermosura. La inmortalidad es un deseo codicioso y egoísta que jamás dejará de vagar por lo más profundo de nuestro subconsciente. Es algo egoísta, solo pensamos en nosotros, pero, ¿Qué nos importa lo que hagan los demás? Somos nosotros los que seremos jóvenes por siempre sin tener que preocuparnos por otros.

Todos pensamos que ser inmortal es lo más fascinante que le puede pasar a una persona, que ser joven por siempre es el regalo más esplendido del mundo, y que terminar con todo es lo más necesario.

Están completamente equivocados

La inmortalidad jamás será un gusto por mucho tiempo, sinó una maldición que perdurará por siempre. Yo Elisabeth... Soy inmortal y no saben cuanto deseo no haber ahnelado aquél codicioso deseo de ser joven por siempre y tener todo el tiempo del mundo. Cometí un gran error. Eterno diría yo.

Recuerdo que me volví inmortal a mis veinticinco años, la verdad no tengo idea de cómo pasó esto, es algo que por mucho tiempo he querido resolver, pero ni con todo el tiempo del mundo lo he logrado. Me dí cuenta de mi inmortalidad cuando ví envejeser a mis seres más amados, y lo más triste y doloroso, verlos morir delante de mis ojos. Con el tiempo, olvidamos cosas importantes, eso pasa cuando deseamos y no tomamos nota de las consecuencias que podría traer consigo nuestros anhelos más profundos . Yo tampoco tomé nota, y con el paso de los años lo olvidé, así como olvidé mis apellidos, olvidé quién era mi familia, así como olvidé mi pasado, así como olvidé lo que se sentía ser normal.

Ahora, desde hace mucho tiempo, podría decirse que años, décadas, siglos, ¡o hasta milenios! He deseado una sola cosa, deseo ser mortal de nuevo, deseo poder envejeser como todos en este mundo, quiero poder formar una familia sin tener que pensar que ellos morirán y yo tendré que presenciarlo con mis propios ojos. Yo solo deseo dejar de ser hermosa, envejecer como todos, y poder morir en paz.

Ese es mi deseo ahora.