Al mal tiempo, hacerle buena cara.
Berlín, Alemania.
Febrero 29 de 2028
Recidencia de la Familia Lycas Hilton.—Es una buena idea —dijo mi mamá alegre, como si su sonrisa brillante pudiera convencerme con facilidad.
—Que no.
—Tu madre tiene razón, es una gran oportunidad —terció mi abuelito con su carrasposa voz deteriorada por los años.
—Que no quiero.
—Ya no tendrás que estar encerrado aquí, podrás hacer amigos, ver cosas nuevas... Piénsalo —dijo finalmente mi papá
—Abuelito, dime si es una mentira lo siguiente: 19 de casa 20 estudiantes de esa Academia fallecen antes de los 25 ¿Verdad o mentira?
El abuelito puso un semblante serio, aceptando por fin que no daría el brazo a torcer tan fácil. Frunciendo los labios terminó por defender—: ellos salen al mundo preparados, nuestra academia no tiene nada que ver.
—Es decir, ¡sí! , mueren antes de los 25 —descifré diciéndoles a mis padres—. ¿cuántas veces puedo salir fuera de la academia una vez que entre?
—Estamos dispuestos a no verte por un par de años... Todo es por tí, mi cielo —dijo mamá.
—¿Abuelito? —ignoré lo que dijo mamá y esperé la respuesta de mi viejo.
—Ni una sola vez—soltó farfullando—; pero eres mi nieto, y yo soy el embajador del Manchester Academy, puedo mover un par de hilos para que al menos mi hija y su marido puedan ir a visitarte una vez al mes.
—Suena como si me fueran a llevar a una prisión —rechisté enojado. Me dejé caer contra el espaldar del sofá frunciendo el seño. No quiero ir a esa academia del demonio. Sin embargo, para mí infortunio debo de asistir a alguna escuela extraordinaria.
En este mundo, cuando naces, el 7,77% de la población mundial nace con una marca en la mejilla... Para ser específico: una letra. Estas van siempre de la A hasta la F, siendo la A de menor rango y la F de mayor rango. A su vez, cada letra se divide por categorías: verde, azul y negro. Siendo la primera más débil, la segunda un punto medio y la tercera la más poderosa de cada rango. Es decir, si naces con una A verde eres lo más débil y patético y si naces con una F negra eres conciderado como clase especial por lo peligroso que puedas llegar a ser.
Solo las personas que nacen con marcas poseen poderes de todos cuántos sean posible imaginar, desafiamos las leyes de lo natural, así que los gobiernos, imperios y reinados de todo el mundo crearon la ADCAE, para ser más específico: Alianza de Confinamiento a Extraordinarios. ¿Su misión principal? Una vez que cumplimos los 12 años tenemos que ir a alguna escuela para personas no ordinarias hasta los 24.
Ahora, yendo a lo importante que claramente soy yo: Archival O'Donnell, en mi mejilla se hace ver una "V" color vino tinto, marca que jamás ha sido vista por nadie diferente a mi familia a demás del médico y las parteras encargadas de mi nacimiento. Esta marca ha hecho de mis cortos 12 años un infierno completo.
—Vad, quieras o no, irás a la academia del abuelo —suspiró mi madre entre cada palabra—, solo quiero que vayas con la mejor actitud.
—No quiero ir —susurré cuando mis ojos comenzaron a aguarse. No quería separarme de mamá y papá.
—Es por tu bien mi niño —dijo papá cargandome entre sus brazos. Mamá se levantó les sofá y abrazó a papá y a mí.
—Prometemos que vamos a visitarte cada mes sin falta.
—¿Lo prometes? —sorbí mi nariz y estiré mi dedo pequeño.
—Lo prometo —dijo mamá cellando nuestro nuevo pacto.
