7

189 12 4
                                    

Narra Asahi

Deje a Daichi en la entrada del gimnasio y fui a buscar mi mochila. Al salir del cambiador, cerré la puerta con llave y baje de dos en dos las escaleras. Al llegar al final, omití uno de los escalones y no pude detenerme a tiempo. Puse mis brazos al frente de mi para detener el golpe. Caí al suelo y me pareció extraño que el golpe contra el suelo no me doliera tanto.

"¡Ah!" Oí un grito provenir debajo de mi. "Mi espalda." Me encontré con unos ojos color negro. Me sorprendí mucho pero cuando volví a mirarlo, sus ojos se tornaron marrones.

"Pesas demasiado y eres enorme." Dijo. Me tomó un momento reaccionar y cuando lo hice me levante y me eche para atrás. Me senté en el último escalón y me le quede mirando.

"Lo siento." Me disculpe. "Debí tener más cuidado al bajar."

"Mhm."

"¿Estas bien?" Le pregunte.

"Si." Respondió. "Solo me dolió un poco cuando caí al suelo. Iba a ir al cambiador a buscar algo."

"Oh." Mientras más lo miraba, más se parecía a Neji. Su cabello era color negro igual que el, excepto que el chico tenía un mechón rubio. Sus ojos tenían la misma forma y el mismo resplandor que el. Tenían casi el mismo tamaño. Solo había una diferencia. Una diferencia enorme.

"¿Que miras?" Pregunto serio.

"Lo siento." Le sonreí. "Es solo que me recuerdas a alguien." Su cara cambio drásticamente.

"¿A quien?" Mire hacía el cielo y me quedé así por un rato. Pude sentir la mirada de el puesta en mi. Esperando con ansias una respuesta.

Se que te prometí no decir nada, pero debo aprender a poder hablar sobre ti sin terminar dolido o llorando. Solo así seguiré adelante.

Cerré los ojos y suspire. Fue una promesa que hice ese día. Por mas estúpida que había sido, la había echo. También la había cumplido al pie de la letra hasta hoy. Si quería seguir adelante tenía que poder hablar sobre el sin tener que terminar dolido.

"Era como tu. Era pequeño de tamaño. Tenía el cabello negro aunque no tenía un mechón rubio. Su cabello era largo. A él le encantaba su cabello largo. A mi también me gusta. Tenía unos ojos negros como la noche. Para mi eran hermosos."

"Le encantaba el voleibol. Ahí fue que lo conocí. Era súper carismático y tenía un resplandor que a donde quiera que fuera, cambiaba el ambiente de cualquiera. Era el mejor chico que había conocido."

"¿Era?" Asentí. Al parecer entendió porque al dar mi respuesta, ví como subía la mirada al cielo también.

"¿Que le paso?"

"Verás, ocurrió un accidente." Tenía que hacerlo. Solo así podría seguir continuando. "Veras, a Neji le encantaba vestirse con faldas. Nunca se colocó una en público pero cuando estaba en su casa, a Neji le encantaba ponerse faldas. Se las robaba a su hermana Ten Ten todo el tiempo y ella solo lo dejaba. Para mi era algo tierno y adorable. También le gustaba arreglarse su cabello en trenzas de vez en cuando. Algunas veces yo mismo se las hacía."

"Un día, por alguna razón, decidió ponerse una para la escuela. Me tomó por sorpresa y no diré que no me molesto. Porque si lo hizo. Bastante. Pero no le dije nada a Neji. Al final del día, unos chicos lo estaban molestando y le empezaron a decir que se parecía una niña ya que tenía el pelo largo más tenía falda. Me enfade y lo defendí."

"Luego, tuvimos una pelea fuerte y terminamos peleados. Ese día no camine con el a su casa." Cerré mis manos en puños. "Lo mucho que me arrepiento de eso."

Te Conocí Donde viven las historias. Descúbrelo ahora