𝓶𝓲 𝓹𝓻𝓸𝓹𝓲𝓮𝓭𝓪𝓭 || riumba ||

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Creo que tener un vampiro obsesionado es algo nuevo pero para que se hagan una idea es un equivalente a tener un acosador muy intenso y fastidioso.

— déjame pensar la mejor forma para decir que No — dije dándole la espalda para cerrar mi armario mientras cerraba la ventana tras del

Ser casa vampiros era el sueño de muchos contándome a mi. uno de los requisitos era ser valiente fuerte inteligente y sobretodo no tener piedad con esos moustros cosa que después de tener un vampiro acosándote me veo más que capacitado

— no me trates mal mi timba que hasta vine temprano por que la noche anterior me cerraste la ventana — sonrió levitando para acercarse a timba pero el peliazul lo empujó con una mueca de molestia

— no quería que un vampiro más pesao que tu viniera y acabara conmigo — se sentó en la orilla de la cama comenzado a quitarse los zapatos para estar más cómodo en su casa

Ya era costumbre. El peliazul hacia su rutina rutinaria como un día normal a diferencia que tenía un chico molesto volando a su alrededor como una mosca que trataba de ignorar

— sabes que ningún otro se atreverá a entrar aquí lo ordene específicamente — cuando estuvo lo suficiente cerca tomo sin previo aviso el rostro se timba obligándolo a mirarlo con una sonrisa ladina — estoy empezando a creer que no me quieres aquí

Ah si olvide mencionar que específicamente el que me fastidia es el maldito hijo del líder de la tribu de vampiros que atormenta mi Aldea!

Mi vida es una comedia

— gracias por descubrirlo ahora puedes retírate y soltarte la maldita cara — trato de soltarte sujetado fuertemente los brazos del no humano sin miedo alguno hacerle daño

— obligame — dijo sin quitar su sonrisa acercando más sus rostros

— mi puño en tu cara te obligara