prologo

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cayó el anochecer, sobre la ciudad de Londres

El ruido que se escuchaba de la ciudad no era muy prominente. al menos no para el joven que caminaba por las afueras de la ciudad, a pesar del ruido de la gente y el big ben que marcaba las cuatro en punto.

El viento soplaba suavemente sobre su rostro inmaculado, mientras que al mismo tiempo movía su suave y brillante cabello negro, que caía en armonioso desorden.

camino tranquilamente, había pasado un tiempo desde que disfruto de un momento de tranquilidad. y se tomo el tiempo para ver el entorno y el paisaje que lo rodeaban mientras se dirigía a su destino, a pesar de que el peligro lo acechaba constantemente, no sentía miedo. Había pasado ya por muchas situaciones peligrosas que lo hicieron crecer y madurar aceleradamente, y convertirse en un hombre. su paso era elegante y equilibrado que solo un guerrero entrenado y experimentado podría dar.

siguió su camino y cuando menos lo esperaba ya estaba en la ciudad, dirigiéndose al hotel donde se iba a hospedar para descansar. tras atravesar unas cuantas calles llego al hotel.

"Hotel langham, espero que las habitaciones se han cómodas" dijo en voz baja, después de pensar eso no perdió tiempo alguno en entrar al hotel, al llegar a la entrada el portero le abrió la puerta, a lo que el joven le dijo gracias. llego a la recepción y con un ligero movimiento de su dedo toco el timbre, ante el sonido una mujer joven salió por la puerta y llego a la mesa. para atender al cliente

"buenas tardes joven, ¿en que puedo ayudarlo?" ante la pregunta, respondió

"tengo una reserva hecha. para quedarme durante 4 días" respondió el sin formalidades.

"nombre completo, por favor", sostuvo su mirada ante el joven que tenia delante de ella. no pudo evitar notar su rostro afilado y apuesto, pero lo que mas le llamo la atención fueron los ojos rojos carmesí que la dejaron desconcertada. 

tendré que darle mi nombre

"nathan Nicolás di angelo", para nathan era algo poco común dar su nombre, en gran parte porque nunca se vio obligado a decirlo aunque también por el hecho de que era reservado en su nombre, pero dado que la chica solo estaba haciendo su trabajo le pareció razonable, la chica al oír su nombre, se dedico a buscar en los numerosos papeles que tenia en la mesa la reserva de nathan, le tomo un tiempo, pero finalmente logro encontrar la reserva al ver la información en la hoja, dijo: " sr. di angelo sígame por favor, lo llevare a su habitación", al oír las palabras de la joven, nathan la siguió. durante el recorrido pudo ver los diferentes sitios que componían el hotel desde el elegante comedor hasta las diferentes habitaciones.

 finalmente llego a su habitación cuyo numero era 301 en el piso 3, entro y pudo ver los diferentes elementos que contenían su habitación: una cama fina con sabanas y cobijas blancas, un escritorio de madera finamente tallada, y un balcón con vista al resto de la ciudad. " si necesita ayuda o algo en especifico solo llámenos por el timbre, si mas que tenga una buena noche, y que disfrute de su estancia, sr di angelo". con sus palabras finales la joven salió y cerro la puerta suavemente, dejando al joven solo en la habitación.

sabiendo que estaba solo, nathan procedió a acomodarse, coloco su equipaje al lado del escritorio, y comenzó a quitarse la ropa para poder descansar. se paro delante del espejo y se despojo su abrigo para finalmente quitarse su camisa blanca, dejando al descubierto su cuerpo musculoso tonificado, su físico era impecable y bien equilibrado, sus brazos eran musculosos y definidos junto con sus hombros y abdomen. Las cicatrices, tanto grandes como pequeñas, estaban esparcidas por la mayoría de su cuerpo, pero aunque que las cicatrices arruinaban la belleza de su cuerpo. su apariencia incluso parecía una obra de arte impresionante. 

crónicas de la oscuridad la historia de un héroe olvidadoWhere stories live. Discover now