-¿Quién eres?- pregunto la joven Melody
-Lo que tu has creado- respondió la sombra
-¿Dónde estamos?- volvió a preguntar
-En el lugar donde te escondes- contestó la sombra de nuevo
-Esconderme...¿De qué?- la joven Melody estaba empezando a asustarse.La sombra avanzó ligeramente hacia ella dejando ver unos zapatos negros, Melody retrocedió para no acercarse a aquel extraño ser.
-¿No te acuerdas verdad?- la sombra de quedo quieta.
Melody pudo ver como esta se rascaba la espinilla con su pie, por alguna extraña razón, Melody no sabía donde estaba ni que hacía allí, solamente había despertado y había aparecido en aquella extraña estancia.
-No es de extrañar, la mente borra aquello que no quieres recordar, pero yo soy el que te puede ayudar a recordar todo lo que te ha llevado hasta aquí- ofreció la sombra y dejó ver su mano pálida, era de carne y hueso, pero muy blanca, como si nunca le hubiera dado el sol.
Melody no quiso responder, ni tampoco darle la mano, tenía miedo, quería volver a casa, quería volver a ver a sus seres queridos, sin querer, Melody se puso a llorar y cayó al suelo quedando sentada mientras se encogía sobre si misma llorando desconsoladamente.
-¡Quiero volver a casa, llévame de vuelta a casa!- exigió Melody entre sollozos.
-¿Por qué, acaso no fuiste tú la que vino aquí por voluntad propia?- pregunto la sombra
-¡Mientes, no sabes nada, eres solo un monstruo mentiroso!- chillo Melody
-Quizá tengas razón, pero ahora mismo, soy tu única opción, dame tu mano, te dejaré ver como llegaste aquí, y si quieres irte te echaré de aquí y volverás a casa, y si no quieres volver entonces no volverás y vivirás aquí- volvió a ofrecer la sombraMelody no quería aceptar, pero era su única opción para salir de allí, si eso conllevaba escuchar al monstruo lo haría sin problemas. Melody alargó su mano y no tardo mucho en sentir el cálido tacto de la sombra, era más cálida de lo que aparentaba.
De pronto, la sala se derrumbó en pedazos y aparecieron en una habitación, las paredes estaban pintadas de verde y la cama tenía tres peluches encima, había una estantería con libros y unos sofás pequeños, Melody reconoció la habitación enseguida, era su cuarto, pero no había nadie, estaba vacío, no se escuchaba nada, no se olía nada, como si todo fuera una visión.
-¿Donde estamos?- pregunto Melody con la cara roja y con lágrimas secas
-Esto es el sitio que consideras tu refugio, tu cuarto, no estás ahora, pero no es de extrañar, a fin de cuentas estas en otro sitio- explico la sombra.
-¿Donde estoy entonces?- pregunto Melody.La habitación se rompió en pedazos y aparecieron en una sala blanca, había una cama con sábanas verdes y una ventana amplia, en la cama había una chica conectada a un montón de tubos, Melody lo vio enseguida, era ella, estaba postrada en una cama de hospital sin poder moverse, Melody ahogo un grito y de un tirón soltó la mano de la sombra. De golpe la sala de derrumbó y Melody cayó hasta acabar en un pequeño prado sin ninguna flor, Melody se llevó las manos a la barriga, le dolía un montón, como si algo la comiera desde adentro para salir.
-No deberías soltar mi mano mientras estemos viajando, podrías perderte en la profundidad de tu mente- dijo la sombra apareciendo de pronto frente a sus ojos
-¿Mi mente?- pregunto Melody, aún le dolía la barriga.
-Veo que no te das cuenta todavía, ahora mismo, estamos en tu mente, en tu rincón seguro, el lugar donde nada te hace daño- explico la sombra
-¿Entonces estoy muerta verdad?- pregunto Melody con miedo
-Aún no, yo te puedo sacar de aquí y devolverte a tu mundo, pero debes saber porque estás aquí-La sombra chasqueo los dedos y ante ambos apareció un hombre vestido de azul, era bajo, gordo y se le empezaba a caer el pelo por el centro de la cabeza, Melody lo reconoció de inmediato, era su padre.
-Papa...- Melody se puso en pie enseguida y se lanzó a abrazar a su padre.
Para su desgracia, Melody atravesó a su padre y cayó de rodillas al suelo.
-No, ese es el recuerdo que tienes de tu padre, un hombre sencillo, con una vida sencilla, pero un oscuro secreto que lo consumía- dijo la sombra y el padre de Melody desapareció
La sombra volvió a chasquear los dedos y está vez apareció una mujer, la madre de Melody, al igual que Melody su cabello era rubio y largo, sus ojos verdes y su cuerpo delgado, Melody intentó abrazarla y para su sorpresa si pudo hacerlo, aunque su madre no correspondió.
-Tu madre, una mujer firme, seria y cariñosa, todo un ejemplo a seguir, pero su vida se torció al conocer a tu padre-
La madre de Melody desapareció y apareció en frente de Melody, pero esta vez no era normal, la madre de Melody estaba muerta, sangrando, con las cuencas de los ojos vacias, ya no tenía ojos, su cuerpo estaba empapado en sangre y su ropa desgarrada. Melody grito y retrocedió lentamente, hasta que resbaló con algo resbalazido, el ojo de su madre era el causante de su tropiezo.
-Aquí está el motivo de tu llegada al hospital, la muerte de tu madre- explicó la sombra poniendo una mano en el hombro de Melody
-¿Quien fue?- preguntó Melody
-Tú-De pronto Melody se tenso y un sudor frío le recorrió la nuca, era imposible, ella no mataría a su madre.
-¡Mientes!- grito Melody y se separó de la sombra.
El cadáver de su madre desapareció y en frente sus ojos se vio a sí misma arrancandole las tripas a su padre con un cuchillo y luego arrancando los ojos a su madre mientras está gritaba de dolor.
-¡Yo no haría eso a mi familia, solo eres un mentiroso, un maldito mentiroso, sácame de aquí!- exigió Melody -¡Cuando despierte todo estará bien, mi familia seguirá viva y yo no hice nada!-
Sin previo aviso a Melody le dio otra punzada de dolor en el estómago y cayó al suelo de rodillas.
-Tienes razón, no fuiste tú, fui yo, verás Melody, hace mucho tiempo, tu me creaste a mi, eras una niña pequeña sin amigos y recurríste a tu imaginación, me llamaste Alal, tu mejor amigo, tus padres se dieron cuenta de que no tenias amigos y querían que buscaras, se iban a interponer entre nosotros y tuve que hacerlo, pero no podía dejarte huir, así que luego hice que te tiraras del balcón de tu casa y quedarás en coma-
-¡Me has mentido, me has engañado, no eres mi amigo!-
Aquellas palabras hicieron que Alal emitiera un sonido de decepción, y con cuidado salió de la oscuridad que lo cubría, ante Melody apareció un ser monstruoso y horrible, tenía la boca deformada y miles de dientes se clavaban en su cara, atravesando sus ojos y nariz, sus manos estaban cubiertas de ojos y bocas, y su pelo estaba hecho de tripas humanas que no paraban de sangrar.
-Tu me creaste, ahora se mi amiga hasta tu muerte- de un chasquido Melody soltó un grito de dolor.
De pronto el pecho de Melody reventó y de este salió una criatura horrible, llena de sangre, con todo el cuerpo lleno de deformidades y unos ojos de cerdo asquerosos. Melody se desmayo, para no volver a despertar nunca.
Nota de Alal: Soy el autor del libro, la sombra mente, el dolor de tu alma, soy tu amigo, hasta que el final del mundo, si me conoces nunca me dejaras, el secreto del padre no era ninguno, los monstruos mienten, pero tu decides si creérlos, una pena que Melody aceptará tan rápido, quería jugar manipularla más aún, pero ahora es mía para siempre.

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Relatos de Terror
TerrorRelatos de Terror para entretenerse un rato, no busco darr miedo, ni si quiera se como escribir terror de calidad, podéis pasarme relatos y los publicaré con vuestros nombres