Angela con tan sólo 15 años le tocó trabajar pará poder pagar las medicinas de su mamá enferma por esa razon decide trabajar en la gran mansión de nathaniel sin saber lo que le esperaba, éste hombre ya la conocía desde que era niña y esta totalmente...
Me tiro en el sofa rendida, dulce podrá ser una bebé pequeña pero da un trabajo que ni se imaginan.
Recuerdo que cuando era pequeña siempre jugué a ser mamá pero jamás creí que eso fuera la tarea mas dificil de todas.
—vaya a descansar yo me encargo de ella.
—no te preocupes sol, estoy bien.
—se le nota cansada, tan solo mire sus ojos. —me pasa su espejito—
—tal vez sí, pero pasar tiempo con mi hija es lo mejor no puedo soltarla.
—solo sera unos minutos mi señora, yo la cuidare bien no puede estar así.
—gracias, te la encargo entonces.
—que descanse. —sonríe tomando a mi bebé— la llevare a tomar sol.
—genial. —me levanto del sofa subiendo las escaleras, una siesta me vendra de maravilla—
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NATHANIEL DALLAS
Salgo al patio de la mansión queriendome encontrar con mi mujer pero sólo esta sol la sirvienta con mí princesa.
— y mi esposa? —le hablo asustandola—
—esta descansado en el cuarto señor, las cosas de la casa la cansan.
—como que cosas de la casa—la miro enojado— se supone que ese trabajo es de ustedes no de ella.
—lo sabemos señor es que ella quiere hacer algo, siempre esta pendiente y también cuida a la bebé y agota sus energias.
—mujer mía tenia que ser. —suelto una carcajada—
—si quiere podemos pasar tiempo.
La miro sin entender, parecía tan santa que se le acabo rápido.
—disculpa?
—puedo consentirlo mientras ella no esta.
—acaso quieres que te despida.
—oh! No es lo que piensa. —ríe—
—pareciera que quieres sexo. —alzo una ceja—
—se me escapo, es que es imposible no pensar de esa forma mi señor.
—olvida esto, no quiero despedirte haces un gran trabajo.
—si señor. —murmura apenada— no volverá a pasar perdoneme.
—ahora dame a mi hija y vete a hacer tus deberes que para algo se te paga.
—si señor. —me entrega a la bebé—
Sonrió al tenerla en mis brazos, lo mejor que me pudo pasar es esto, tengo todo lo que tanto quise.
—perdon por todo no quise hacerlo enojar.
—espero que sea la última y ya vete.
—si señor. —entra lo mas rapido posible en la casa—
—ahora solo somos tu y yo. —muevo a mí hija— voy a cuidarte, jamas permitiré que alguien te dañe.
Ella tenía sus ojitos bien abiertos mirandome con curiosidad y hacía ruiditos con su boquita, era simplemente perfecta.
—eres mi mayor tesoro dulce, seras la mejor princesa de mi imperio, de mi mafia y yo te ayudare a defenderte y a usar armas cuando seas grande.
—jamas permitiría que mi nieta sea como tú. —nefer se acerca hacía mi lado— no puedo permitir que ella sea así.
— es mi hija no tuya.
—eso lo se, quiero cuidarla quiero que sea buena persona, no quiero que termine dañada como tú.
—por favor nefer no me hagas reír.
—a pesar de todo. —acaricia mi hombro—siempre te voy a querer hijo, eres mi mayor tesoro nathaniel, mi pequeño.
—no te hagas la victima ahora.
—no me hago la victima, siempre te quise y asi sera siempre, yo te di la vida te tuve 9 meses dentro mío, no puedo soportar que mi hijo a quien siempre cuidé e intente darle lo mejor me odié, yo jamas quise dejarte.. Tu papá era la peor persona y cuando quise irme contigo no me dejo, si quería irme seria sin ti pero yo no podía dejarte...quede como la sirvienta después de años de casada quede como una simple sirvienta todo para pasar tiempo contigo, te amo hijo...
Algo se removió en mi interior, estaba sintiendo algo de pena, pero recorde todas las cosas que había dicho la esposa de mi papá quien si me cuidó durante toda su vida, ella dijo que mi mamá jamas me quiso y por eso se conformo con ser la sirvienta, porque quería demostrar que aún vivía en la gran mansion hasta que papá la hecho de casa.
—te dijeron tantas cosas feas mías que no son ciertas, hijo hago todo por ti hasta estos momentos ,aguanto humillaciones porque quiero estar a tu lado ,recuperar todo ese tiempo perdido a tu lado. —cuando menos me di cuenta ella me estaba abrazando como pudo sin aplastar a mi hija— te amo hijo siempre te amare.
—basta nefer, no quiero escucharte más.
No quería seguir escuchando su historia, no quería sentir pena.
—hijo...
—no sigas, no te quiero cerca mío me das asco. —camino adentrandome a la mansión—
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Quiero aclarar que yo no acepto ni romantiso este tipo de relaciones que hacen mal. Solo escribi porque me gusta, pero eso no significa que acepte que esta cosas de maltrato exista en el mundo siento que no es muy sano ver el maltrato como amor y lo digo mas por si hay niñas de 13 o 12 leyendo esto porque se que algunas se lo toman como una forma de expresar amor cuando no es asi, el maltrato nunca será amor porque amor es cuando el hombre le regala flores y quiere a la mujer. No cuando el hombre somete a mujeres a una vida infeliz llena de golpes y abusos.
