Apuesta

#20

Historia original de kotheDef

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Hay momentos en la vida que por más que tratemos de evitarlos, deben suceder, este en particular tenia un choque de sentimientos para mi, quería que esta cirugía se realizara, de esa forma mi padre se iría pronto de mi trabajo, pero me pone jodidamente nervioso, no quiero entrar a ese pabellón con el hombre que me dio la vida.

Puedo imaginar como será, él sobre cada cosa que haga, corrigiendo frente a todos y tratándome como un maldito mocoso, porque papá tiene ese actuar ridículo, de niño nunca me trato como uno, pero cuando me fui a vivir por mi cuenta, él considero que yo acababa de quitar mis pañales.

A eso sumemos que Zee estará en la habitación, lo vuelve todo más intenso para mi, no quiero que me vea con mi padre, no quiero que piense en lo idiota que soy, por alguna razón que atribuyo a mi reciente enfermedad, necesito que él no vea mi debilidad o se va alejar y sin darme tiempo de encontrar una cura para este padecimiento.

Con Mew llevamos un listado riguroso de mis síntomas, incluso con los exámenes que me he realizado para descartar otras enfermedades, mi amigo me ayuda con cada registro y me revisa cuando le digo que algo nuevo aparece.

Hasta el momento tengo las arritmias, molestias estomacales, es como si se me revolviera todo cuando él hace ciertas cosas, insomnio, eso sucede las noches en que me acuesto sólo en mi cama, así que termino entrando a la habitación de Mew para que me abrace, incluso siento que me da fiebre verlo cuando los otros médicos se le acercan mucho, he comenzado a pensar que es una enfermedad peligrosa, nadie puede tener tantos síntomas.

Suelto un suspiro y agrego jabón liquido en mis manos mientras las lavo con cuidado, esto es demasiado importante de hacer, incluso escobillo mis dedos para que todo quede impecable, tengo mi traje completo azul oscuro y el gorro que cubre todo mi cabello, las zapatillas cómodas y el cubre calzado, pero siento que falta algo y no puedo dar con eso.

—Te harás heridas en los dedos si sigues con eso. —Pestañeo un par de veces para salir de mi nubla y alzo mis ojos para ver quien me habla.

Mi mirada da con la de Zee, sus ojos me estudian con cuidado, justo ahora podría darme uno de esos abrazos que tanto me gustan, pero no se puede, no antes de una cirugía, bajo mi cabeza y niego .

—¿Todo bien? —Pregunta y asiento.

—Conejito, estaré mirando todo, cualquier cosa mira al vidrio de los estudiantes y veras mi rostro enseguida. —La voz de Mew me hace dar un paso atrás alejándome de Zee.

—Yo quiero cruzar esta puerta y ver tu rostro en esa ventana, así que estas perdiendo el tiempo. —Mi amigo esta apoyando una mascarilla en sus labios, pero puedo ver como sonríe porque sus ojos hacen esa mueca adorable.

—Lo tienes conejito, ignora a tu padre y deja de lavar tus manos, eres un dios superior de la cirugía. —Le regalo una sonrisa y esas palabras necesitaba.

Con confianza renovada me alejo de los lavaderos y camino para cruzar las puertas de vidrio, puedo hacer esto, una cirugía más, no importa quien esta adentro y llevo una vida estudiando para ser el mejor cirujano.

Mis manos limpias y en lo alto son cubiertas por guantes de látex por una de las enfermeras, también se cubre mis labios con una mascarilla, agradezco a la chica y camino en dirección a Joss, este me mira y guiña un ojo en mi dirección.