-Capitulo 1-

3.7K 39 0
                                    

31 de diciembre a las 23:50

(Luna): ¡Quedan 10 minutos para que sea año nuevo!

(Yo): ¡Qué emoción! Espero que este año empiece con buen pie y sea mejor que el anterior.

(Chloe): ¡Quedan 2 minutosss!

La última campanada sonó, ya marcaban las 12 en el reloj, ¡era Año Nuevo! Todo el mundo empezó a festejar, a abrazarse y besarse, había gente que lloraba de la emoción. Un nuevo año empezaba, nadie sabía cómo sería ni lo que les traía este año nuevo.

(Yo): ¡Feliz año nuevo chicas!

(Luna y Chloe): ¡Feliz año!

Después de haber brindado por el año nuevo fuimos a una fiesta que habían organizado unos chicos de nuestra universidad. Era en una casa grande, parecía una mansión, todo el mundo bailaba y bebía como si no hubiera un mañana. Al entrar por la puerta de frente vi a un chico alto y de pelo oscuro, me dieron ganas de conocerlo. Me acerqué a él y empezamos a hablar, era un chico muy interesante, teníamos cosas en común. Se llamaba Robert, nombre algo poco común, nunca lo había escuchado.

(Robert): Me ha gustado hablar contigo preciosa pero me reclaman mis amigos, te dejo mi numero y hablamos.

Me dio su número y nada más llegar a casa le puse un "Hola, soy Korassam", no sabía si mandárselo ya que eran las 4 de la mañana y probablemente estuviera ebrio y no sabría donde se encuentra, aún así se lo mandé.

~A la mañana siguiente~

|Nuevo mensaje|: ¿Quién eres? ¿Te conozco?

Me despierto por la notificación, tengo un dolor de cabeza tremendo, vaya resaca. Con un ojo abierto y el otro medio cerrado consigo leer el mensaje, Robert me había respondido pero no sabía quién era, que raro...

|Yo|: No sé si me recuerdas, soy Korassam. Anoche nos conocimos en una fiesta.

|Robert|: mmm no recuerdo a nadie llamado así, te habrás confundido.

|Yo|: Ah, ya lo siento perdona las molestias.

(Que raro juraría que guardé bien el número de teléfono) -piensa Korassam-

|Nuevo mensaje|: Era broma, ya sé quién eres. Hola preciosa.

|Yo|: Por un momento pensé que de verdad me había confundido de número.

Estuvimos hablando como 2 horas seguidas, en un chico muy divertido. Me hice un desayuno comida porque para las horas que eran desayunar no tenía mucho sentido. Al rato vino mi padre de trabajar, últimamente anda muy liado en el trabajo.

(Padre): Hola hija, ¿Qué tal estás?

Intento no mover mucho la cabeza por el dolor que tenía y le respondo como si fuera sonámbula.

(Yo): Bien, con algo de dolor de cabeza.

De un momento a otro me empiezo a encontrar mal, me mareo y me caigo al suelo.

~Horas después~

¡Dónde estoy, este no es mi cuarto! Cuando consigo abrir bien los ojos me doy cuenta de que estoy en el hospital, tengo a mi padre y a un doctor al lado.

(Padre): Hija te desmayaste en la cocina y te diste un golpe grave.

(Médico): Tienes solo una pequeña bajada de tensión, el golpe ya está todo solucionado, te hemos puesto puntos igual en el transcurso de estas horas te duele un poco, te tendremos 2 días aquí bajo vigilancia mirando la tensión.

Pasaron los 2 días, estuve muy cómoda y me traían la comida a la cama, fui mejorando y ya se me había curado la herida de la cabeza, me dieron el alta y por fin ya estuve en mi casa, cuando llegué mi móvil no paraba de sonar, ¡Tenía 30 mensajes de Robert! Al momento le respondí, se había preocupado de que yo no le respondiera ni me llegaran los mensajes, en el hospital no tenía internet y no podía contactarme con nadie. Estuvimos hablando un buen rato y me dijo para que quedáramos a tomar algo en el café que está a la vuelta de la esquina. El tiempo pasó volando y me lo pasé muy bien a su lado, creo que me está empezando a gustar. Al día siguiente teníamos clase asique tuve que ir pronto a casa, me llevó en su coche hasta la puerta de mi casa, me despedí con dos besos. Estuve toda la noche pensando en él todo el rato con una sonrisa en la boca.

-¡RING..! ¡RING..! (La alarma de despertador estaba sonando y de un brinco me levanté de la cama)-

(Padre): ¡Korassam! ¡Levántate ya! Vas a llegar tarde como no te levantes y te prepares.

Me metí rápido a la ducha y en 5 minutos ya había terminado, me preparé y me puse cómoda, cogí una sudadera, las mallas deportivas y unas zapatillas de deporte, bajé corriendo a desayunar, tenía solo 5 minutos antes de que viniera el bus. Desayuné lo más rápido que pude y metí una manzana en la mochila para el almuerzo. Cuando llegué ahí estaban mis amigas, salí corriendo donde ellas a contarle la tarde de ayer. Les conté lo bien que la pasamos y lo majo y divertido que es. Entramos a clase y..

(Ve al capítulo 2)

Amor ProhibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora