Steve Roger y Tony Stark no solo eran los superhéroes más poderosos del mundo, sino eran esposos que habían decidido pasar un fin de semana en las paradisiacas islas de Hawaii. Cuando Steve le había propuesto esa escapada a su pareja, Tony literalmente había dado un salto de alegría, como un niño pequeño.
Era la una y media de la tarde del día sábado, cuando la feliz pareja caminaba de la mano por la costanera. Tony no era un hombre que se acomplejara por absolutamente nada, ni mucho menos que le molestara la diferencia de estatura entre él y su esposo. Pero en ese momento por alguna razón eso le molestaba de sobre manera
- Entremos a esa tienda – dijo Tony consiente de las miradas que despertaba su esposo – quiero ver esas zapatillas
- Trajiste como media docena a un lugar donde lo más cómodo es ir descalzo – dijo el rubio – ¿y quieres unos zapatos? ¡Y con tacos!
- Pero me gustan esos zapatos – dijo Tony – además le prometí a cuernitos llevarle un regalo. Y por cierto, son zapatos de hombre
- ¿Desde cuando eres tan amigo de Loki? – pregunto Steve frunciendo el ceño
- Negocios – dijo Tony encogiendo los hombros
- ¿Qué clase de negocio puedes tener tú con ese psicópata? – pregunto Roger
- Es un buen tipo a pesar de todo – dijo Tony
- Tony Stark – dijo Steve –, si me entero que hiciste algún trato con ese...
- Tranquilo capi paleta – dijo Tony sonriendo examinando unos calzados – ¿Cómo se te ocurre que puedo hacer algún tipo de trato con Cuernitos? Si esta más loco que una cabra. Señor, ¿tiene este modelo en verde con negro?
Steve McGarrett caminaba mientras su compañero y mejor amigo iba parloteando sin cesar sobre haber perseguido a pie como locos a un sospechoso por diez cuadras solo para descubrir que la persona que realmente necesitaban para resolver el caso era un escapista que los había confundido desapareciendo literalmente frente a sus ojos
- ¡Maldición! – dijo McGarrett en voz alta
- Lenguaje – dijo un rubio alto que venía en sentido contrario sin detenerse y a McGarrett le fue imposible no volcar a mirar al rubio
- Animal – dijo Danny – ¿Qué esperas?
- Ya voy Danno – dijo McGarrett siguiéndolo, aunque le fue imposible no girar para ver como la otra pareja se alejaba sin mas
Sin embargo había algo extraño, y no era la que uno fuera rubio y el otro castaño, o que este último movía bastante las caderas al caminar, lo que le llamo la atención a Steve McGarrett fue que el mas alto lo hacía un paso más atrás y doblando las rodillas para que su cabeza apenas y sobrepasara a su compañero. Inconscientemente daleo su cabeza ligeramente y luego miro a su compañero
- ¿tal vez, si...? – se dijo McGarrett a si mismo
- Steven, camina – dijo Danny y él apretó el paso para alcanzarlo
__________________________________
Steve McGarrett hacia seis años había obtenido un doctorado en sacar a la gente de quicio, según su rubio compañero, quien refunfuñaba mientras se agarraba del asiento del copiloto de su propio Camaro mientras iban camino al centro de la ciudad
- ¿Podrías ser más cuidadoso, por favor? – exigió Danny – Gracias
- ¡Es una emergencia! – dijo Steve

ESTÁS LEYENDO
Dulce Venganza
FanfictionSteve McGarrett y Steve Roger se burlaron de las estaturas de Danny Williams y Tony Stark respectivamente. Lo que no esperaban era que Loki cobrara venganza, aunque en el proceso Thor se viera perjudicado