Delta.

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Park estaba preocupado, había faltado varios días a la escuela por vergüenza de encontrarse a Sunoo y que este le reclamará, además. Aquel día se cumplían cinco meses de la relación de Yang y el alfa.

Gracias a la mordida que había dejado en el cuello del mayor, y por ende formar un lazo, sabía cómo se sentía, si estaba triste, preocupado o molesto... Y aquel día estuvo lleno de emociones para el rubio, Sunghoon realmente quería ir con el, abrazarlo y darle besos hasta que se durmiera en sus brazos.

Pero no podía, no se sentía con el derecho de poder tocarlo con amor después de lo que había hecho... aunque por la marca en su cuello tenía la obligación de estar a su lado.

Fue ahí cuando sintió el dolor de Kim... Algo malo estaba pasando y sin que se diera cuenta, ya estaba llendo hacia el.

— Jungwon escúchame... Puedo explicarlo y- — El Omega estaba enojado, muy enojado... Pero al mismo tiempo triste, su novio le había sido infiel ¿No era acaso lo suficiente para el?

— ¡Hyung, me fuiste infiel con otro maldito alfa! — Exclamó entre sollozos, Sunoo miro al suelo avergonzado... Si tan solo supiera su corazón dejaba de latir por momentos, el era culpable de todo lo que estaba pasando. — ¡Dejaste que te marcará mientras estábamos en una relación, y ahora te está pasando lo que sea esa metamorfosis! — Yang salió corriendo desesperado, Kim no sabía cómo reaccionar... Cayo de rodillas al suelo mientras se repetía mentalmente lo mismo.

La había cagado...

Las lágrimas recorrían sus mejillas, se apoyó en la silla de su lado y escondio su rostro entre sus manos y no pudo contenerse, se sintió vulnerable, solo quería que alguien lo consolara.

— Delta... — Llamaba al unísono intentando que el imbécil que lo había condenado apareciera y lo abrazara como aquel día en los baños. Necesitaba ese extraño olor a artesanía que al parecer era de Park.

Los brazos del más alto le rodearon, apoyo su rostro en su pecho y comenzó a percibir el olor peculiar, estaba ahí... No sabía cómo, pero lo había encontrado.

— Sung- Sung-Sunghoon — ya estaba con el, pero aún así le llamaba, por más que lo odiara el estaba ahí.... y ahora más que nunca necesitaba estar con el, estaba mal, estaba muy mal, pero su corazón  y su cabeza no concordaban del todo.

El rubio unió sus labios con los del más alto, pronto se arrepentiría y sabía que Yang le restregaría su traición en la cara, pero por más egoísta que sonara ahora sólo estaba pensando en el... Y en la necesidad de estar con el falso beta.

"Lo siento, lo necesito"