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Prólogo.

-- ¿Falta mucho Mónica? --

pregunto por décima vez la chica mientras miraba alegremente por la ventana de aquél tren.

-- Lana, Mi niña, sabes que te quiero mucho pero si preguntas eso de nuevo tendré que tirarte por la ventana -- dijo un tanto cansada de que le preguntase lo mismo.

La castaña sólo guardo silencio y continuó con su vista hacia la ventana.

-- Se nota que estas emocionada -- Hablo la azabache recargandose en el hombro de la castaña.

-- Claro que lo estoy, es la primera vez que visito la ciudad en muchos años -- dijo con un leve brillo en los ojos.

La azabache sólo sonrió, le encantaba ver a su mejor amiga tan alegre.

-- ¿como vas en tus estudios? Si no mal recuerdo la última vez que hablamos me dijiste que entrarias a una Universidad especializada en medicina -- mencionó la castaña.

-- Sobre eso... -- dijo para comenzar a rebuscar en su mochila

-- ¿paso algo? -- pregunto preocupada.

-- Miralo tu misma -- hablo para después mostrarle un gafete que contenía sus datos junto al lo que parecía el nombre de la Universidad. -- pase -- dijo y aunque no lo noto su voz salió más alegre de lo usual.

-- Felicidades Mónica ¿o debería decirte Doctora Mónica?. -- dijo lo último más como una pequeña broma.

-- Por favor no --

Ambas comenzarón a reír tras las palabras de la azabache.

-- Lana mira --

señaló Mónica a una pareja que se encontraba un par de asientos por delante de ellas.

-- Miralos que guarros, que se estan comiendo el morro frente a todos. --

-- Dejalos Mónica --

Pero la azabache no la escuchó.

-- Pero que eso no se hace, que se consigan un hotel o algo. --

La castaña sólo rodó los ojos y saco de su mochila unas galletas.

-- Toma come galletas --

La azabache sólo le miro con indignación por intentar callarla con unas galletas, sin embargo las tomo.

Ambas siguieron hablando tranquilamente durante el transcurso hacia la ciudad.

Mónica no podía pedir más en aquél momento, iba rumbo a la ciudad con su mejor amiga la cual se quedaría todo el mes, por fin había ingresado a la universidad de sus sueños, tenía un empleo y hogar estables y lo más importante: podría ayudar a miles de personas dentro de muy poco tiempo.

Para Mónica por fin todo estaba a su favor, ¿Qué podría salir mal?.

Muy mala pregunta.

De pronto todo Colapso.

Un gran estruendo fue seguido por un fuerte impacto contra algo, todo se oscurecio.

Gritos, Sangre, Muerte, Desesperación.

Y entre tanta confusión sólo llegó a su mente una palabra.

-- ¿Lana? --