6.

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Eran probablemente las 3 de la mañana cuando un telefono comenzó a sonar insistentemente.

Lust, quien estaba dormido en su cama, se movia con la finalidad de levantarse, pero tenia demasiado sueño. Pero tal parece que la persona que llamaba no entendía eso.

Molesto, agarró su móvil que estaba en su mesa a lado de la cama y contestó.

-¿Quién mierda es?-Preguntó, era obvio que estaria molesto.

-¡LUST, LUST, NO ME LO VAS A CREER!- Una voz gritona y emocionada estaba del otro lado de la línea.

-¿Ink...? Por dios... ¿Sábes acaso que hora es?-

-Uhm... ¿Las una de la mañana?-

-Las 3 y media de la madrugada, Ink.-

-Uy...-

-¿Qué sucede?-Preguntó, dando un suspiro y rindiendose.

-¡Ya tengo el guion!-

Lust se quedó en silencio, sorprendido por lo que escuchó. ¿Acaso era una broma? No, Ink no haria una broma sobre eso.

-Claro, lo tengo, pero... No está del todo terminado.-

-¡Pero lo tienes! ¿La idea, no?-

-¡Sí! Solo me falta unos aspectos del nudo para finalizar con el desenlace.-

-¡Eso es genial! ¿Entonces la próxima practica ya tendrás el guion?-

-Aún tengo dudas, pero sí, eso quiero.-

-Entonces adelante. Solo... ¿Duerme, sí?-

-Sí, solo... Primero quiero terminar el guion.-

-Entiendo, suerte. Buenas noches.-

Lust colgó, para luego dejar su telefomo y volver a dormir. Realmente al inicio estaba molesto, pero pudo comprender la razón de la emoción contagiosa de su amigo.

Tenia un guion, lo que significaba que ya comenzó la "obra que movería al mundo".

Volviendo con Ink, justo al dejar el telefono, volvió a su computadora, mirando el monitor de esta. Allí estaba escribiendo su obra, pero ahora mismo estaba estancado.

Aún tenia demasiadas dudas, las hubiera consultado con Lust pero no queria molestarlo de más.

Ese era un miedo constante del pobre Ink. Desde que era pequeño con sus sueños y aspiraciones soñadoras... Su madre le habia apoyado siempre. Aún cuando fracasaba, y gracias a ella pudo mantenerse solo. Por el dinero que le fue dado.

Su padre desde siempre decia que era una mala idea, que nisiquiera eran sueños reales. Esas palabras le dolían. Pero su madre siempre le obligaba a callarse. Al final, este se fue de casa. ¿Su paradero? No lo sabia y ni le importaba.

Lo que no sabia, es cuando su relación con Zephyr se fue a la mierda. Siempre habian sido buenos hermanos, pero desde que apareció los papeles de su tio, era una lucha por aquel teatro que rompió su relación.

¿De verdad era eso lo que pasaba?

Cierta tristeza lo invadió. Siempre molestó a su madre con sus sueños. ¿Pero... Y si su padre tenia razón?

Quizás solo era eso, un sueño.

¿Entonces... Valía la pena realmente molestarse en eso?

















La respuesta era sí. Ink lo sabia. Se dió golpecitos para volver a reaccionar. No podia darle a nadie el lujo de verlo derrotado, no sin pelear y mostrar de lo que era capaz.

Y así, comenzó a escribir otra vez.

"La Gran Obra" [ErrorInk]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora