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Me pediste perdón, yo te rechacé, rechacé
Quería que comprendieras que yo sufría, yo sufría
Pero dejaste tu aroma en las sábanas, en las sábanas
Daría todo por estar entre tus brazos, entre tus brazos
___________________________________La lluvia golpeaba los tejados de madera, que además de producir un sonido acogedor, escondían los solitarios sollozos de dolor de un azabache tumbado en su alcoba, en aquella isla flotante sobre el mar que cubre el borde del mundo como una manta que se extiende y retrae sobre ésta.
La oscuridad se expandía por todos los rincones de la casa, haciéndola lucir más grande y vacía de lo que era.
Sus amigos habían dejado de intentar hablar con él desde hace un par de días, cuando eso sucedió. Simplemente se encerró en su mansión y se negó a hablar con nadie, incluso su mejor amigo Luzu, el cual con toda la amabilidad y comprensión del mundo le ofreció su hombro para llorar y desahogarse, y no podía estar más agradecido con el castaño por sacarlo de ese ahora, maldito lugar y apoyarlo en ese duro momento.
"¡Todo esto era un plan para sacarle la mitad de las cosas que tiene Vegetta, quiero todos tus diamantes!"
El tiempo pareció ralentizarse apenas esas palabras escaparon de la boca del que consideraba el amor de su vida. Toda la vista a su alrededor se nubló como en aquellas películas viejas, dónde una profunda negrura cubre los laterales de su campo de visión excepto en su centro, dónde con lágrimas crecientes, miraba con el corazón haciéndose añicos al de peluca rosa.
"...¡Y ahora, que has firmado la separación de bienes toma tu anillo! No lo quiero." y procedió a lanzarlo a los pies del pelinegro, como si fuera una basura.
Sus amigos intentaban procesar lo que estaba sucediendo, hablando en voz alta y desordenadamente, pero el moreno ya no estaba prestando atención a nada a su alrededor.
Y mientras ellos trataban de convencer a Rubén de que se retractara de sus palabras, Samuel caminó hasta uno de los vitrales laterales de aquella pulcra iglesia.
Miró su reflejo en los coloridos azulejos, que ante sus ojos, ya no eran tan brillantes y alegres como hace unos cuantos minutos atrás. Sus ojos estaban empañados de lágrimas, y un sentimiento de vacío que no le permitía emitir sonido alguno empezó a crecer desde su pecho.
No podía reaccionar, no podía pensar, no podía gritar, no podía moverse. Estaba estático, con la cabeza inclinada desde su posición. Escuchaba la voz de Luzu a sus espaldas, diciéndole algo que tampoco escuchó. Su respiración era lenta y profunda, como si su cuerpo intentará mantenerse en una pieza por fuera mientras era desgarrado lenta y dolorosamente desde dentro. Y oh, como deseaba que ese dolor fuera capaz de matarlo ahí mismo, porque no sabía si sería capaz de seguir viviendo después de aquello.
No supo si fue consiente o inconsciente, pero su cuerpo empezó a moverse hacia la salida, lento al principio pero aumentando de velocidad mientras se acercaba a las enormes puertas, y como si despertara de un profundo sueño, el dolor empezó a brotar hacia el exterior, no conteniendo sus fuertes sollozos mientras corría fuera de ella iglesia, con los gritos de sus amigos y algunos invitados que lo llamaban.
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Je te pardonne | RUBEGETTA OS |
FanfictionDónde Vegetta y Rubius se reconcilian luego de lo ocurrido en la boda, pero el final es más agridulce de lo que pensaron. 💜Inspirada en la canción "Je te pardonne" de GIMS (feat. Sia)♥️♥️