Título de la parte

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Se escuchaba la moto lineal a todo volumen.

Tiro las llaves en la mesa más cercana al igual que su abrigo. Caminó lentamente, arrastrando su cuerpo hacia la cama. Vivía en un pequeño apartamento monoambiente. Al llegar al borde cayó desplomada panza arriba. Sentía el pesar de más de 8 horas trabajando fuera de casa. Cerró los ojos sintiendo la satisfacción, ya faltaba poco para que acabe ese día. Mañana era Martes, los martes son muchísimos mejor que los Lunes.
Intentando despejar su mente sintió el silencio, casi sepulcral si no fuera por el sonido de los aviones al pasar tan cerca del suelo. Cerró los ojos, sintió el calor emanar de su cuerpo y la incomodidad en su entrepierna. Desabrochó los botones de su pantalón y metió su mano empezando a jugar con su clítoris. ¿Que mejor que una paja después de un día estresante? Contenía la respiración para no soltar ningún sonido obsceno al sentirse cerca del orgasmo.

-Hey.- escuchó, pero no hizo caso. Siguió con los ojos cerrados en lo suyo.

-Hey, te estoy hablando. Hazme caso.-

Y en un solo movimiento más se sintió venir, liberando energía y sintiéndose más relajada soltó sus manos a ambos lados de su cabeza. Y al fin se digno a abrir sus ojos.
Encontrándose con el rostro de la peli morena, teniéndola casi a centímetros. Piel clara con diversas manchas de otras tonalidades, cejas despeinadas, ojeras no naturales, y labios rosas. Sin pensarlo dos veces acercó el rostro y en menos de dos segundos le había dado un beso, corto pero dulce.
La contraria arrugó la cara, aparentando disgusto. Se levantó y se posicionó a su lado.

-Vaya saludo de llegada que me das.- Dijo mientras se sobaba la cara con cansancio, refiriéndose a la paja.

Al oír eso solo soltó una risita seguido de un suspiro. Sabía perfectamente que en realidad no le había disgustado,al menos no tanto. A ella le daba igual la mayoría de las cosas cuando estaba cansada.
Después de una larga pausa, se tapó los ojos con el antebrazo y volvió a bajar la mano a su entrepierna. Le daba cierta vergüenza el parecer una adolescente hormonal. Soltó un quejido.

-Basta de eso. Ven aquí.-

No pudo evitar soltar una sonrisa nasal. Seguido sintió unas manos bajar sus pantalones dejándola en ropa interior y jalándola al borde de la cama.
Sintió unos labios al rededor de su clítoris, lamiéndolo y chupándolo a través de la tela mientras que con el dedo corazón hacia presión en su entrada. Con la mano libre colocaba sus piernas sobre sus hombros para tener más acceso a hacer lo siguiente. La contraria soltaba quejidos casi suspirando. Cuando se dio cuenta ya la había despojado de la pequeña pieza. De inmediato sintió los labios y lengua húmedos de la contraria pasar por todo su coño. Detuvo su lengua enfrente de su entrada, ingresando hasta donde el largo de su lengua le permitía. Escuchando gemidos cada vez que hacia algún movimiento brusco. Ella se encontraba respirando erráticamente por el calor de la situación, sudor pegado en la frente y cabello despeinado.

La otra sintiendo sus labios mojados por la humedad de la zona. Dirigió su mano hacia su clítoris para seguirlo masajeando con su dedo pulgar. Poco a poco la chica bajo ella se estremecía más, dándole a la contraria la señal que estaba a punto de venirse, subiendo la velocidad. Y ella sintió la explosión de placer al llegar al orgasmo.

La peli morena saco su lengua y tomando un respiro le dio una mirada a la chica que yacía echada en la cama, con sus piernas abiertas a ella, respirando pesadamente, cruzaron miradas y esta le sonrió con sorna. No se cansaría nunca de esa imagen en su cabeza.
Inmediatamente la que estaba recostada jaló a la otra hacia ella. Haciendo que se siente a horcajadas, y la beso lo suficiente para darse cuenta del sabor a piña en su boca.
-Veo que ya probaste el litro de jugo de Piña que me tome en la tarde.- No supo que responder.

Se levanto y dándole una nalgada la mando a ducharse.
-Pero, ¿acaso no quieres que te quite el estrés a ti también?- le tiro una mirada coqueta, pero solo recibió una almohada en su cara.
-Deberías escucharte.- soltó una risita.- Te atreves a decir eso viéndote tan ridícula.
Soltó un bufido mientras se volvía a colocar la ropa interior.
-Como quieras cariño, la que se lo pierde eres tú.- Hizo un puchero demasiado exagerado para su gusto mientras buscaba una toalla.
Mientras la otra se dirigía al baño ella se echó en la cama boca arriba.
-Nah, no me pierdo de nada. No sabes comer coños.-
Lo dijo tan francamente que le dañó el orgullo. Sintió un bajón inmediato. ¿Acaso era tan mala en las relaciones sexuales?
-Hey, ya te vi. No me pongas morritos. Estaba bromeando. Pero, ya que estás cerca del cajón pásame el vibrador.- Dijo sin poder aguantar la risa al final de la oración.
De mala gana rebusco en el cajón y al encontrar el dichoso vibrador se lo lanzó, ojala, solo ojalá no le haya caido en la cabeza.
-¿Que te creías? Lo atrapé mi amor.- Soltó una sonrisa con diversión.
-Sili istiy brimiindi. Mi dignidad idiota.- Y seguido de eso cerró la puerta del cuarto de baño tras ella.
-Hey, cariño. Era broma.-
-Ajá, si claro. Don comedia.-
-¿Sabes que eres la mejor comiendo coños del mundo existencial?
No escucho respuesta.
-Aún recuerdo la primera vez que me hiciste un oral. Fueron de los momentos más delicioso que pude experimentar...-
Se escuchó la puerta rechinar.
-¿Enserio?-
La vio salir sin ninguna prenda de ropa puesta. Asomándose por la puerta. Quizá ella no era 90-60-90, pero a sus ojos ella tenía un cuerpo para morirse.
Se acercó sin dejar de mirarla a los ojos. Y la abrazo y en un menor descuido bajo ambas manos a su culo, masajeándolo. Se acercó a su oído y susurró.
-Claro que no.-
Su indignación fue a niveles extremos que la separó de si y se volvió a meter al baño.

-Hey, ¡escúchame!-

Escuchó el sonido del agua caer.

-¡No te escucho!- Mintió.

-¡Solo estaba jodiendo!-

-¡Ya te dije que no te escucho!- Mintió otra vez.

-¡Hey!-Rió, le divertía cuando se ponía en ese plan. Le alegraban el día, la noche y la semana.

-¿Que pasa?- Levanto la voz ya bastante irritada. 

Ella le encantaba de pies a cabeza, de dentro hacia afuera. Era lo mejor de su momento.

-Te amo.-

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⏰ Last updated: Dec 12, 2023 ⏰

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Cabello negroWhere stories live. Discover now