PRECIPITACIÓN DE ESTACIONES

Amor de estaciones

Hace mucho tiempo existía el Dios celestial que creo el mundo en todo su esplendor, este Celestial creía que algo le faltaba a su mundo casi perfecto, pero no encontró ese que, pasaron los años y nada cambiaba, las plantas, animales, personas, todo era absolutamente igual, cansado de esto el Celestial decidió visitar al oráculo sagrado, para saber qué es lo que le podía faltar a su mundo casi perfecto
–Lo tengo todo y a la vez no tengo nada, mi mundo es perfecto en sí, pero….
–Es igual todo el tiempo verdad?-contesto el oráculo sagrado
–Exactamente, no hay nada nuevo y temo que las criaturas que cree se aburran en este mundo-su rostro demostró una clara perdida de interés en su propia creación- dime gran oráculo que es lo que es lo faltante?
–Tu viniste a mi así que contestare, tu mundo necesita morir y volver a nacer sin que tu intervengas, necesita el calor que haga que las plantas y animales rebocen con la alegría del sol, así como necesitan descanso de este, donde el sol se oculte y otros animales renazcan en este ciclo de intercambio

El ser Celestial escucho muy atentamente las palabras de aquel oráculo y con todo el entusiasmo en su corazón decidió crear las estaciones que también serían hijos suyos

El primero fue el hijo de invierno, la segunda fue la hija primavera, el tercero fue el hijo verano y para el final la hija Otoño

Les dio la tarea de hacer variar el mundo con su poder otorgado, el primer hijo podía congelar lo que quisiera, en su época los animales se resguardarían y reposarían, uno que otro animal gozaría de esta hermosa época, la segunda hija se encargaría de descongelar y hacer despertar a todos los animales durmientes , brindando calidez y haría brotar pequeños botones de plantas y así sembrar vida en el mundo, el tercer hijo se haría cargo de poner al sol en su completo esplendor, así mismo haciendo abrir los brotes y hacer florecer todo a su paso, ocupándose de que todo ser vivo estuviera muy feliz y la última hija se haría cargo de que los seres vivos terminaran su proceso de vida, poniéndolos a descansar al sueño eterno, dejando a su paso hojas caídas de los árboles y espacio para la nueva vida.
Con esto el ciclo de principio a fin estaría en perfecto equilibrio, así que el celestial volvió una vez más al oráculo, para poder agradecerle por todo, sin embargo, este tenía otras noticias
-yo te he ofrecido mi ayuda y lograste hacer tu mundo perfecto, pero, te advierto no debes intervenir en los asuntos de tu mundo, sobre todo de esos humanos con razonamiento
–Por qué? - pregunto dudoso el celestial, pues si ese mundo lo había creado él, debía tener el derecho de intervenir
–Debes dejarlos ser, ellos se dejarán guiar por la codicia, pero también habrá personas buenas, para ello y descifrar quienes son dignos de ser hijos tuyos deberás hacer una prueba
–Qué clase de prueba?
–Según tengo entendido tu decidiste que tus hijos: invierno, primavera, verano y otoño procreen con los humanos
–Sí, decidí que ellos procrearan, para que así su trabajo sea más sencillo y que reciban amor igual que todos
–Está bien, entonces te daré una profecía, en el futuro de aquí a muchos años tu mundo se dividirá en esas estaciones, con absoluta paz y tranquilidad, pero los hijos del invierno solo podrán procrear con hijos de invierno, así como el resto entre su propia raza, de otro modo, si naciera un niño que fuera mezcla de 2 estaciones, caerá la desgracia en tu mundo, debes decirle esto a todos
–Dero no lo entiendo que daño haría un niño nacido de ambas estaciones?
–No hará ningún daño, pero esta será la prueba, aquel que ayude al niño será digno de que seas su padre, de otro modo no será digno, así que este secreto de la prueba solo debemos saberlo nosotros, pero debes contarles la profecía a tus hijos
–Muy bien así lo hare, gracias por tu sabiduría
El celestial no dudo ni un segundo y fue a contarle a sus hijos sobre dicha profecía, evitando la prueba, sus hijos obedecieron ya que le tenían mucho respeto a su padre

El celestial decidió no intervenir y no mostrarse frente a otro ser que haya sido creado por su mano, entonces esa fue la última vez que se supo del Dios
Pasaron los años y se crearon las 4 grandes estaciones, invierno, primavera, verano y otoño, sus naciones eran grandes y prósperas dirigidas por un consejo que eran los más sabios, los 4 grandes, ellos recibieron la profecía y tenían el rol de encargarse de que ese niño no naciera nunca y si en caso de que lo hiciera deberían eliminarlo, a pesar de que la profecía era para todos, las nuevas generaciones que iban ocupando el puesto de los 4 grandes, solo se dedicaron a decir que estaba prohibido tener una relación con alguien que no sea de su estación o en casos peores procrear con otras estaciones, de otro modo se ejecutaría a los implicados.