Dios de la Fortuna - Danmachi [En pausa ]

Visitas inesperadas

Un nuevo día en la ciudad laberinto.

Los aventureros se levantan y preparan para incursionar en el calabozo, los locales empezaban a arreglar el lugar para atender a los visitantes.

El gremio de manera activa y rápida atendían las quejas y dudas de los aventureros, proporcionaban información acerca de diversos temas públicos.

Tambien los aventureros cambiaban los núcleos de monstruos para así obtener ganancias de sus incursiones al calabozo, mientras más se adentren al calabozo los núcleos soltados por los monstruos tendrán un mayor en valis.

Si los aventureros tienen suerte hay una probabilidad baja en la cual podrían obtener drop ítems de los monstruos, los cuales en tienen un valor mas elevado dependiendo de cuál sea.

Los drop ítems en su mayoría son usado como objeto de fabricación de demás accesorios, por ejemplo, los obtenidos de los pisos profundos son usados para fabricar armas y armaduras mucho mas resistentes, otros son usados como fabricación de pociones curativas y mente para durar más tiempo en combate.

Alguno ítems son usados como accesorios de lujo o decoración para diversos lugares, Orario comercia los núcleos y objetos obtenidos con los demás renios para un buen flujo de dinero y buenas relaciones.

En todo Orario se encontraba un pequeño Dios levantándose en su habitación.

Este es Hasu, despues del día anterior al acomodarse en su nuevo hogar, limpiaron un poco las habitaciones para tener un buena noche de descanso.

Como tal Hasu empezó un poco desorientado, estuvo ordenando su habitación mas de lo que había, rebuscaba alrededor de la habitación para evitar cualquier factor externo.

Que Erza encontrara un buen hogar fue de pura suerte, como tal edificios de gran tamaño ya están ocupados en su totalidad y si uno desea alguno lo mas común es mandarlo a construir.

Hasu estaba empezando a observarse para así saber de una vez el como es que se veía, con unos pantalones de color negro portaba una playera simple de color blanco y portaba una túnica oscura.

Al observarse al espejo solo se quedo viendo fijamente su cara y cabellos.

Es un dios que tiene una imagen la cual puede decir que parece infantil e inocente, tiene ojos heterocromáticos, uno es de color cian y el otro de color morado, un asunto muy peculiar.

Lo mas impresionante es su cabello, el cual es de color blanco platinado que le llegaba hasta la cintura, lo mas curioso es que al final de su cabello el color cambia constantemente, formando así un efecto parecido a la vista de un arcoíris.

Tiene una altura de 145 cm lo que lo hace parecer un niño pequeño.

Como tal el dios Hasu esta descalzo debido a que no disfruta mucho de los zapatos y prefiere sentir el piso directamente, incluso sin nada sus pies siguen igualmente limpios.

Cuando el dios empezó a bajar a la planta baja para ver que hacer en el inicio del día visito la cocina, observó cada detalle en la misma con una estufa funcional, diversos utensilios y espacio para las bebidas, incluso había una despensa para la conservación de alimentos.

Podría decirse así que el edificio solo necesita repararse y estará en plenitud y brillante dándole así un aspecto maravilloso.

"Kami-sama"

Una voz distrajo al dios el cual fue a ver quien era, cuando llego pudo observar a sus tres miembros con sus trajes puestos.

"¿Qué sucede?" dijo Hasu