𝕁𝕒𝕪 𝕄𝕠𝕠𝕣𝕞𝕖𝕚𝕖𝕣 - ᴘ.ᴍ

•Chapter 1•

Hoy tenía que hacer un par de cosas, así que me levanté, me dirigí hacia el baño para arreglarme.

Les voy a contar sobre mi. Tengo veintidós años, me llamo _____ D'amelio, y soy abogada. Me gustan mucho las mandarinas, bailar y la música. También disfruto mucho los momentos con mis amigos o con mis familiares, soy muy hogareña.

...

Luego de estar lista, me coloque un poco de perfume y me dirigí hacia la planta baja, hasta la cocina, dónde esta mi familia desayunando.

—Buenos días —Dije entrando a la cocina, sentándose en la gran mesa que hay en esta.

–Buenos días, hija. –Saludó mi padre con una gran sonrisa. Siempre estaba de bien humor.

—Buenos días, cielo. –Mamá me abrazo en forma de saludo. Otra que estaba de buen humor siempre.

–Buenos días, _____ –Saludó Charli mi hermana menor con una sonrisa. Tan linda.

–Toma, tu desayuno, cariño. –Mamá me sonrió dandome mi café junto a unos ricos panqueques.

–Gracias, ma. ¿Cuando vuelve Dixie? –Pregunté dando un sorbo al rico café.

–Creo que dentro de una semana. –Informó Charli con una mueca. Todos extrañaban a la mayor de las hermanas.

–Bueno, me tengo que ir. –Papá se despidió de las tres para irse donde su trabajo.

–Niñas, voy a estar en la oficina. –Ambas asentimos con una leve sonrisa.–¿Hoy vas a tu casa ___?

–No creo, mamá. Me quedaré unos días más. –Dije al ver que Charli me miraba con un tierno puchero.

Mamá asintió y salió de la cocina. Cómo hoy me tocaba lavar lo utilizado en el desayuno, me levanté para lavar.

–Tengo que hacer unas cosas en el shopping, ¿Quieres acompañarme? –Pregunté mientras lavaba las cosas.

–Oh lo siento, tengo planes con Chase. –Habló mi hermana menor con algo de timidez.

–Bien. Te me cuidas, eh. –Hablé mirándola de reojo viendo cómo reía levemente.

–Bueno, chau. Te quiero. –Dijo para besar mi mejilla y darme un pequeño abrazo.

–Tambien te quiero. ¡Te me cuidas! –Grite cuando ya estaba por salir, ella grito un "si, tranquila", para luego salir de la casa.

La terminar de lavar los platos, me dirigí hacia mi habitación donde tomé mi bolso, para ya irme a hacer los trámites que tenía que hacer.

Al llegar al shopping, hice lo antes posible todos, pues no me gusta mucho estar allí. Al salir del banco, pude ver a un niño, el cual estaba solo, se escuchaba sus tiernos sollozos, y como llamaba a alguien. Enseguida me acerque a el para ayudarlo.

[Payton] (tiempo antes):

Al haber terminado mi rutina diaria, me dirigí hacia la habitación de mi hijo, para despertarlo. Al entrar pude verlo bien dormidito con las sábanas revueltas por todos lados, sonreí antes esto y me acerque a el.

—Bebé...–Lo llame acariciando su mejilla, y acomodando los pelos rebeldes de su frente.

–Papi, déjame dormir. –Balbuceó más dormido que despierto.

–Oh que mal. Entonces voy a tener que ir solo a Mac Donald, a comer una rica hamburguesa. –Dije con fingida tristeza. Jay abrió los ojos repentinamente y se sentó algo dormido.

–Yo evantado, papi. –Dijo rápidamente con los ojos algo hinchado, su pelo disparado para todos lados, y su regordetas mejillas rosaditas. Simplemente adorable.