Mi otra Yo ( Juliantina)

Capítulo 18

Juliana 

Mis ojos estaban completamente cerrados pero mi cuerpo era capaz de percibir cada detalle a mí alrededor, desde sentir las suaves manos de val que rodeaban parte de mi cuerpo hasta identificar cada aroma perceptible. La esencia del ambiente era mágica, al igual que todo lo vivido la noche anterior y me era difícil creer que hace algunas horas nos estábamos declarando sentimientos tan reales y bonitos; mi corazón estaba explotando de amor y mi mente repasaba cada detalle del momento: los ojos azules de val mirándome mientras yo intentaba buscar una vez más sus labios, el aroma de su cabello, la suavidad de su cuerpo, el roce que ambas generábamos, los nervios, las ganas de ser parte de la otra, la sonrisa maravillosa que se dibujaba en su rostro con cada palabra que salía de mi boca... todo estaba en mis pensamientos y podría estar todo el día repitiendo la secuencia perfecta que vivimos la noche anterior, pero la luz del sol ingresaba por todas partes y los movimientos de mi compañera me hacían suponer que ya era la hora de abrir mis ojos y de encontrarme con la persona más hermosa de mi mundo.

Sentí como su mano buscaba la mía y lentamente su respiración estaba más cerca, de pronto ya pude sentir sus suaves labios contactando los míos.

Val: Creo que alguien no se quiere despertar (me decía mientras me abrazada y apoyaba su cabeza en mi pecho)

Juls: Llevo como veinte minutos despierta, aquí la dormilona es otra (le sonreí aún con los ojos cerrados)

Val:¿ Ah sí? ¿Y se puede saber que esperabas para despertarme con un beso? (levantó su cabeza y pude sentir su mirada intensa, por lo tanto decidí que era momento de abrir los ojos por completo)

Juls: Que tu dieras el primer paso (intenté buscar mi teléfono para ver la hora)

Val: Yo ya he dado muchos primeros pasos...te estas quedando muy atrás (ella también se estaba acomodando e intentaba buscar ropa que supongo yo estaba desparramada por todo el piso, a la vez que se tapaba con la sabana)

Juls: Si recuerdo bien fui yo la que di el primer beso (le di una mirada satisfactoria)

Val: Pero fui yo la que insistió en acompañarte hasta tu habitación (me devolvió la mirada)

Juls: Creo que ambas hemos dado pasos (la miré tiernamente) pero los míos han sido más importantes (volví a reír)

Val: Ja Ja... creo que te castigaré por ser tan pesada por las mañanas... pero creo que ahora lo único que quiero es una ducha y cambiarme de ropa (se acercó hacía mí y me abrazó por detrás) ¿Tienes un baño apto para eso? (ambas reímos ante ese comentario)

Juls: Tengo un baño privado, el de Alex debe ser un completo asco en estos momentos y el de mis papás debe estar en similares condiciones, así que lo más inteligente es ocupar el mío (le indiqué la puerta y le di unas toallas y ropa para que se pudiera cambiar)

Val: ¿Me puedo quedar con esta camiseta? Huele mucho a ti y tiene mucho estilo de ti

Juls: Es mi favorita, pero creo que se te vería mucho mejor a ti (le di un beso rápido en la mejilla)

Val: ¿Solo en la mejilla?- me miro extrañada

Juls: Val...ni siquiera me he lavado los dientes, no es muy higiénico darnos tantos besos - reí

Val: Tus besos siempre son perfectos (me tomó del brazo acercándome hacia ella y tomando mi cara para depositar una secuencia de besos muy perfecta) Así está mucho mejor

Juls: Estas un poquito loca Carvajal- le sonreí

Val: Esta loca se tiene que ir a la ducha, te dejo respirar por veinte minutos- Acto seguido cerró la puerta del baño y yo me quedé sentada en el borde la cama, intentando ordenar todo lo que estaba pasando y también ordenando un poco el desorden que había en mi cuarto.

Luego de unos quince minutos, las cosas estaban un poco más en orden y me iba a disponer a revisar las notificaciones de mi teléfono, cuando sentí que alguien golpeaba a mi puerta... pregunté quién era pero no obtuve respuesta.

Al abrir la puerta pude ver a la persona que hace algún tiempo se me había declarado sin ser correspondida, pero con la cual tuve una amistad muy bonita y sincera; lo último que había sabido de ella era que estaba estudiando en Barcelona y que sus padres estaban haciendo negocios con los míos. Después de cinco años, puedo decir que el aire Europeo le había hecho muy bien, su cara mantenía algunos rasgos pero su energía era muy diferente, ahora sus ojos tenían algo especial y misterioso, su sonrisa seguía siendo una de las más perfectas que he visto después de la de Valentina y ahora tenía su pelo más claro.

Camila: ¡Hasta que finalmente te encuentro! ¿Es tan difícil dar contigo en tu propia casa? (soltó una risa)

Juls: Hay cosas que no cambian (le devolví la sonrisa)

Camila! Tu estas exactamente igual! Guapa como siempre (esta vez se lanzó sobre mí y nos fundimos en un abrazo...un abrazo entre dos amigas que de alguna manera se extrañaban)

Juls: ¿estas más alta o es idea mía? Y ahora incluso te veo más rubia

Camila: ¡Europa te cambia la vida juli!...aunque hay cosas que no puedes cambiar aunque te vayas a otro país- ese comentario estuvo seguido de un silencio un tanto incomodo

Juls: Dime que al menos te sigues llamando Camila Vega- intenté cambiar de tema

Camila: incluso tu humor es el mismo (golpeo suavemente mi hombro)... Supe que estas estudiando Medicina y que al parecer vas muy bien

Juls: Creo que si... se me da bien

Camila: Siempre fuiste buena en todo, no me sorprende que seas la mejor de la clase (me miró con cierto orgullo en sus ojos) Es por eso que decidí traer un desayuno lleno de Vitaminas y proteínas para mi súper doctora (de un momento a otro hizo aparecer una bandeja que tenía todo lo me gustaba...incluso una barra de chocolate)

Juls: Wow! ¿Y este desayuno? ¿Estamos en un hotel o que pedo?- por algunos segundos olvidé que alguien estaba terminando su ducha en mi baño.

Camila: Las hermanitas Valdés y su costumbre de casi no tener comida en la nevera...me desperté temprano y fui a comprar algunas cosas

Juls: ¿Dormiste aquí? (la miré sorprendida)

Camila: Pues si...en el cuarto de huéspedes como la gente normal que visita una casa

Juls: ¿Y esa ropa? Bueno... y esa camiseta (recién había caído en cuenta que Camila solo llevaba puesta una gran camiseta y al parecer hacia abajo solo era ropa interior)

Camila: ¿Esta? Me la prestó tu hermana, que por cierto está en coma etílico en el primer piso

Juls: Como te dije anteriormente...algunas cosas no cambian (ambas reímos)

Justo en ese momento pude sentir como la puerta del baño de abría y Val se asomaba hacía mi habitación, su rostro cambió un poco al ver la situación en la que nos encontrábamos con Camila...pero rápidamente le regalé una sonrisa y las presenté.

Juls: Ella es Valentina, una amiga...una muy buena amiga (mi mirada intentaba buscar la de Val, pero esta simplemente ignoró mi comentario y sonrió de forma forzada)

Camila: Es un placer (ambas se saludaron, pero la tensión era evidente)

Val: Perdón, ¿Cuál es tu nombre? Juliana olvidó mencionarlo (Val simplemente seguía ignorando mi mirada)

Camila: Me llamo Camila...soy amiga de Juli pero en realidad recién ayer volví a México, me ausenté por cinco años

Val: Un gusto entonces, siempre es bueno volver a casa (rápidamente la mirada de valentina se dirigió hacia el desayuno que hace unos momentos Camila había dejado en mi cama) Veo que tienen un desayuno que tomar...

Juls: Desayunemos las tres...Val acompáñame a la cocina y buscamos algunas cosas para compartir (la tomé suavemente de una de sus manos y entrelacé nuestros dedos, al volver a buscar su mirada esta vez me encontré con una sonrisa)

Val: (rápidamente me dijo unas palabras al oído) ¿Así que...desayuno a la habitación?- Yo solo le sonreí y la invité a salir del cuarto.