1. Fever

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Juliana estaba perdida en sus pensamientos cuando el coche se detuvo. La fuerte música del club nocturno traspasaba las paredes e incluso podía sentir la vibración de la música en los cristales. El conductor llamó su atención y ella bajo del vehículo agradeciéndole su servicio. Frente a la entrada observó las luces neón en forma de arco iris, los sonidos provenientes del lugar incrementaron cuando la puerta se abrió y un grupo de personas riendo ingresó.

"Ahí estas" escuchó a sus espaldas y se giró para encontrarse con una mujer de cabello negro y chamarra de cuero lanzando la colilla de su cigarrillo al suelo para luego pisotearla con la punta de sus botas.

"Fer, no hagas eso" la amonestó la morena y le señaló un bote de basura cerca de la entrada del club "a mi no me impresiona toda tu exhibición de chica mala ¿eh?" la miró de arriba abajo desaprobatoriamente.

La pelinegra rodó sus ojos con media sonrisa "Hola a ti también" se acercó para dejar un beso en su mejilla "y yo ya te tengo impresionada" bromeó con un guiño.

"Por favor" se burló con una ceja levantada "al menos cómprame algo de tomar primero"

Caminaron juntas a la entrada donde las recibió un chico musculoso con una camiseta negra al lado de la puerta quien reconoció a Fernanda y entablaron una charla rápida. Juliana conoció a la chica cuando estaba en la universidad, la morena siempre había sido de pocos amigos, sin embargo con pocas conversaciones habían conectado, encontrando el gusto de ambas por las mujeres un elemento en común. Juliana había sido mucho más tímida a diferencia de Fernanda con su actitud directa y sin rodeos. De alguna forma se equilibraban. A pesar de perder contacto cuando finalizaron sus estudios, recientemente se habían reencontrado en el mismo club en el que se encontraban y retomaron su amistad desde donde la habían dejado.

El sitio estaba a explotar, y Juliana no había tenido muchas ganas de salir, pero la energía de la multitud rápidamente estaba contagiándola y haciéndola sentir más a gusto. Se ubicaron en la barra y ordenaron bebidas para ambas, Fernanda removiendo su chamarra para dejar sus brazos expuestos que dejaban ver claramente el arte allí tatuado. La chica del bar se quedó mirándola cuando entregó la orden, mordiendo su labio inferior y observando a la pelinegra fijamente mientras se inclinaba y dejaba ver su generoso escote.

Juliana vio a Fernanda replicar la mordida de labio y guiñarle un ojo a la mesera. Arrugó su nariz y se acercó más a la chica "Me podrías decir ¿porque acepte venir contigo esta noche?"

"Eres la compañera de conquista perfecta Juli" replicó golpeando el hombro de la chica con su puño.

"Tú no necesitas que te ayude" bufó indicando a la mesera que gesticulaba un saludo moviendo sus dedos coquetamente hacia su acompañante desde el final de la barra.

"Mira, yo me llevó mi chica para esta noche y tú la tuya, win-win" la morena cruzó sus brazos con gesto serio "no me mires así, tú haces lo mismo o dime ¿Cuándo fue tu ultima relación estable?"

Sintiéndose expuesta Juliana conectó sus ojos y cambió el tema "¿Qué paso con Laura? ¿no estabas saliendo con ella? ¿O era Jennifer? No, espera ¿Frida?"

Fernanda tenía la fama de casanova. Era una coqueta sin remedio y tenía una fila de mujeres detrás de ella. Juliana pensaba que no había ningún problema, ella también había tenido suficientes conquistas sin compromisos en su historial. El inconveniente era que su amiga no se saciaba y tenía tanto relaciones cortas como aventuras de una noche, ampliando exponencialmente los nombres en su lista. Ni se diga cuando se le 'reunía el ganado'. No era nada agradable.

"Hmm no, ninguna de esas ¿te acuerdas de Victoria? Que salía con Camila, ¡tu estuviste con ella! La ex de Xime ¿no?" Juliana asintió despacio a toda la información "pues era con Natalia, la mejor amiga de su actual novia"

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