El dolor de un corazón negro

Quien soy?

Recibí la noticia de forma indirecta, tan rápido como me informaron sentí mis piernas temblar, tal vez lo conocía, tal vez no, honestamente mi mente es un revoltijo de memorias, encontrar la una en ese mar podría arruinarlo más, lo único que se es que sentí mis piernas temblar, mi expresión fue de sorpresa, ví más lágrimas en sus rostros y solo quise correr...

Nunca fui bueno expresando mis emociones, creo que así me educaron, si te duele te aguantas, siempre se serio, nada te puede... No, nada te debe afectar, no puedes sentir miedo...
En diversas ocasiones tuve la sensación de hacerlo pero no podía, un golpe para callar, otro para aprender...

Con el tiempo aprendí a ser así, incluso me diagnosticaron Sociopatia...

Si algo pasaba era yo quien tenía que permanecer frío y al mismo tiempo optimista, aún si veía que todos estaban desolados, era yo de quien debían tomar la fuerza para levantarse, si algo pasaba hacia chistes, comentarios tontos, lo que sea para aligerar el humor, aun si me ignoraban, así tenía que ser.

Pero ahora ya no puedo, tengo ganas de llorar, mi cuerpo entero tiembla, ni puedo hacer chistes, mi cabeza duele, el torso ne arde y mis piernas junto a mis brazos están cansados y tiemblan... Pelee con alguien con palabras, tal vez no me di a entender o no hablé con la suficiente delicadeza, sólo se que fue mi culpa, entro al lugar y ante dos personas empiezo a lagrimear, podría ser? Finalmente aprendí a sacar mis emociones? La tristeza, la pérdida al fin dan pasó a las lágrimas, siento que salen con cuidado de mis ojos al igual que el flujo nasal, empiezo a llorar, aprieto los puños, mi piel suena cuando los tenso aún más...

Vaya, creí que finalmente podría hacerlo pero no, me detengo de golpe, algunas lágrimas aún salían pero las detuve de golpe mientras escuchaba

Y tu porque lloras?

Otra vez, no puedo, me lo recuerdan, debo callar... Lo hago y siento que algo se aplasta dentro de mi, oigo las lágrimas de otros, los sollozos y los envidio, una de las personas se va y después la otra, me quedo ahí, luego tengo que ir y estar rodeado de un mar de lágrimas, quiero llorar, quiero sentarme y descansar pero no puedo, mis lágrimas salen, mi nariz se llena de mocos pero los detengo, mientras alzo la cabeza y siento que esa tristeza se arrastra por mi garganta desgarrandola por dentro, mi estómago arde y después de un tiempo logro salir de ahí, me piden que haga una cosa, no hay tacto en las palabras, no se dirigen por mi nombre sólo una orden y un sobrenombre, acepto, no tengo muchas opciones tampoco, sólo tengo que ir al sanitario, me piden que lo haga rápido y corro, me siento en la taza y vuelvo a sentir las lágrimas salir, no puedo dejarlas, si ellos ven las marcas me irá mal...

Aprieto los puños, me agarro la cabeza, siento que es una olla de presión, una bomba a punto de reventar, la tristeza, las lágrimas se niegan a ahogarse una vez más, alzo la cabeza, abro la boca, quiero gritar hasta reventar mi garganta pero nada sale, pienso seriamente golpearme, golpear mi barbilla, mi nariz o mi estómago, lo que sea con tal de distraer mi atención, veo la pared, es lisa, mi mente se lo piensa, quiero golpearla, darle con toda mi fuerza, golpear hasta sentir que mis nudillos se rompen, la carne se abre y mis manos queden solamente como dos sacos húmedos de cemento, por mi mente pasan ideas, ideas malas, oscuridad, sangre, quiero cortarme, dolerá pero así podré distraer tanto a mi mente como a ellos, sangrare pero puedo lavarme, no por nada estoy en el baño, podría vendarme las manos, preguntarían obviamente pero soy bueno para ocultar las cosas, algo podria pensar, una nueva moda, que quiero aprender a pelear o un cosplay barato de algún personaje de anime.
Estoy tentado, podría hacerlo, tengo mi rastrillo a la mano

Mi mente divaga, mientras pienso en aquella película del Depredador del año 1987 con Arnold Schwarzenegger, pienso en uno de sus personajes, un actor negro que traía un rastrillo con el y que en cierto momento de tensión lo pasó y presiono con su rostro con tanta fuerza que se cortó y se rompió...

Pienso en el y pienso que tal vez podría hacer lo mismo, pasarlo muchas veces por mi brazo y hacer presión en la muñeca, pero es tonto, no tengo la misma fuerza y mi rastrillo no es desechable

Me levanto, limpio todo y ahí es cuando el me doy cuenta que ya me controle, ya sólo hay dolor pero es tolerable, veo la hora, es muy tarde, se preguntaran donde estoy y eso significa problemas, salgo de donde estoy, corro hasta donde están, al menos no hay marcas de nada, me ven y noto la frialdad, me tardé, lo se y ellos no se molestan en recalcarlo más de una vez, me dejan en un lugar, no puedo moverme de ahí, pero me piden buscar cosas, tardo, no se en donde están y si pregunto es inútil, tengo que encontrarlo, tardo al hacerlo y chiflan, me gritan, quieren que me apure, encuentro lo que busco y se los doy, no hay gracias, los entiendo, no puedo molestarme, me pidieron que hiciera algo y tarde, además ellos están tristes, tengo que ser empático, sonrio, al menos aún puedo hacerlo, me vuelvo a mi lugar, ya no tengo sentimientos tristes, no hay nada en mi mente, no hay oscuridad, no hay nada, mi estómago duele un poco pero ya se pasará, el dolor no importa, yo no importó, tengo una tarea, tengo que ayudar a los demás

Porque de eso se trata esto...
Perdón, también los molesto a ustedes jeje, no piensen que me hago la víctima, no quiero su lástima, estoy bien, siempre tengo que estarlo, perdón, siempre lo estoy...

Mucha tontería, perdón por hacerle perder su tiempo, quieren oír un chiste? Yo también jejeje..

Un ciego le dijo a otro

- Ojalá Lloviera

El otro le responde

- Si, ojala también yo

Se los dije, son tontos pero al menos funcionan...

Pues incluso en el fin del mundo hay que reír...