Misterios- 24

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Kiraz después de la conversación con su tía estaba tan perdida... Como podía Can ocultarle que no tenía buena relación con su madre y, sobre todo, ¿por qué delante de ella y su padre se mostraban tan bien?

Tenia que atar cabos y resolver todo lo que estaba pasado a sus espaldas, pero tenía claro que Can no iba a despejar esas dudas, desde aquella noche en la discoteca en la que le dijo que no la quería y descubriendo después lo del bebe...la confianza en él se había esfumado. Aún no había vuelto a ir a la habitación de Can, pero el preguntaba por ella a diario y le mandaba mensajes pidiendo verla, pero lo tenia claro, debía saber para entender, no estaba dispuesta a sufrir otra vez.

Sonó la alarma, poco mas de las 8:00 de la mañana pasaban y Kiraz se despertaba como cada día para ir a clase.

Aysel- Buenos días cariño, cada día madrugas más.

Kiraz- Apenas duermo (desde que sabía que su madre había mentido sobre la relación que tenia con Can apenas le dirigía la palabra)

Aysel- ¿Y eso hija? ¿Los estudios?

Kiraz- La familia...

Aysel- ¿La familia?

Kiraz- Si, la tita atormentada por amor, el tito impedido, papa ausente como siempre y tú, tu desconocida.

Aysel- ¿Cómo? ¿Por qué dices eso cariño? (su cara cambio de color)

Kiraz- Nada. Olvídalo

Y se marcho del comedor sin apenas a ver probado bocado del desayuno y dejando a su madre a cuadros sin saber que quería decir su hija.

Llegando a clase recibió un mensaje al móvil, era el...

"Aun no se que te aleja de mí. No puedo vivir sin ti, siento a verme dado cuenta tan tarde, pero eres tu la que sale en mis sueños y no puedo estar al otro lado de la pared y no verte...cuando escucho que entras en tu habitación y no entras en la mía...la respiración me falta. No sé cuántos mensajes van, pero no parare hasta que cruces mi puerta..."

Aunque no entendiera nada cada mensaje le partía el alma. Estaba tan enamorada de el que cuando leía eso su mente decía olvida todo y ve con el pero esta vez quería ser fuerte. Se recompuso un poco y fue cuando con la mente fría pensó como descubrir la verdad de todo. Tenia que decirle a Can que su madre sabia lo que pasaba entre ellos y que lo aceptaba. Tenia que pensar como y de que manera hacer que eso fuera creíble, pero si lo conseguía lo mismo el contaba todo lo que estaba pasando.
No iba a ser fácil, pero tenia que intentarlo por que su tía no tenía intención de irse de casa y a
Can le quedaba poco tiempo con la pierna escayolada y sabía que cuando eso pasase la casa iba a ser una locura.

A la hora de comer cuando llego a casa su padre estaba en el salón y le pidió de hablar.

Burak- Hola hija, ¿Qué tal? ¿Cómo ha ido el insti?

Kiraz- Bien, como todos los días ¿ocurre algo?

Burak- Tu madre me a dicho que ayer estabas rara y decias cosas que bueno... ¿piensas que estoy ausente?

Kiraz- Mama... Dios... no lo puedo creer, mira papa no quise decir que estés ausente en mi vida si no que, bueno tu trabajo no te deja pasar tiempo aquí haciendo pues no se ver una película con tu hija con un bol de palomitas, pero te digo algo... eres la única persona ahora mismo en la que confió y siento que no tenía que haber dicho eso perdona.

Burak- Hija tu madre solo estaba preocupada, dice que apenas hablas con ella y con el tío...ya ni lo visitas en su habitación. Se que ahora con la tita pues ella quiere estar mas con el y a lo mejor sientes que tu espacio, el que teníais antes, esa conexión pues no está, pero sabes que el te necesita y no se merece que estas lejos de él. (que sabrás tu papa, pensaba ella)

Kiraz- Mira papa lo de mama es cosa mía, y lo del tío... pues si creo que tengo que pasar más tiempo con él, lo quiero mucho ¿sabes? Voy a disfrutar con el hasta que la tita se lo lleve...

Cuando termino de comer se levanto de la silla y antes de entrar en su habitación recordó el mensaje que había recibido cuando iba a clase...

"Cuando siento que entras en tu habitación y no en la mía me falta la respiración..."

Se paro ante la puerta de la habitación de su tío y le entraron los nervios. Respiro ondo y apretando fuerte el pomo se dispuso a entrar. Al abrir la puerta Can estaba dormido, tenia una carita de ángel preciosa. Llevaba una camiseta de manga corta blanca y estaba tapado con la sabana de la cama hasta la cintura. Estaba fuerte y sus brazos eran tan grandes que solo se imaginaba dentro de ellos acurrucada a su lado... El pelo casi rubio caía en la almohada, daban ganas de meter los dedos y enredarlos en su precioso aroma. Volvió en si y se metió de lleno en la habitación y cerro la puerta. Era la mejor ocasión ya que su madre y si tía estaban fuera visitando a unas amigas y su padre después de comer siempre se echaba una siesta hasta la hora de volver a irse a trabajar.

Al cerrar la puerta Can abrió lentamente los ojos y al verla se los froto fuerte como si no se creyera lo que estaba viendo.

Can- Hola... no, no creo lo que estoy viendo. Debe ser un sueño.

Kiraz- Hola, ¿Cómo estás? No quería despertarte, pero es el único momento que podemos hablar sin que la casa este llena de jaleo.

Can- ¿quieres hablar? Te he echado de menos

Kiraz- Yo también, pero tenia que despejar la mente y pensar bien. Mucha información y mucho caos con mi tía de visita y demás.

Can- Tu tía. No se qué hace aun aquí.

Kiraz- Tal vez está aquí esperando algo ¿no? Después de esa llamada... le diste esperanzas creo que es normal que ella quiera gastar el último cartucho contigo. Son muchos años.

Can- Si la llame, pero escucha, estaba bebido, tú y yo estábamos mal y ella me conoce bien pensé que era la única que podía ayudarme, pero no significa nada.

Kiraz- Significa todo. Escucha no he venido para hablar de mi tía si no de mi madre. Creo que lo sabe. Sabe que entre tu y yo hay algo. (Can quedo sorprendido)

Can- ¿Por qué dices eso? ¿Te ha dicho algo?

Kiraz- Si y no. Me hablo un poco en clave e intentando decir sin decir nada. Lo bueno es que me dio a entender que lo que yo decidiera estaría bien. Creo que aprueba lo nuestro.

Can- ¿eso crees? Quiero decir, ¿esta segura? Sería una sensación tuya. No sé no creo que tu madre apruebe con tu tía aquí que tú que yo salgamos.

Kiraz- Te digo lo que me dijo. Ella ya no es un obstáculo y no se me dio que pensar. He sido dura con toda tu relación con mi tía y todo eso del bebe, pero es duro por que no dejara de ser tu primer amor y yo... (Can le puso la mano en la boca y la acaricio suavemente)

Can- Escucha ella es mi primer amor, pero no el ultimo. Mira tu as despertado en mi cosa que jamás despertaron con ella. Tu me as llevado a un mundo de inocencia y de pureza que nunca tuve. Yo quise mucho a tu tía y claro que he vivido cosas con ella inolvidables, pero se terminó, nuestra relación fue bonita, pero tuve que superar muchas cosas también y lo que hubo malo fue mui malo.

Kiraz- ¿De verdad? Me hace mui feliz escuchar eso, por eso creo que para confiar en esto que tenemos la mejor prueba es que mi madre acepte. Tenemos que contarle a mi madre por que creo que nos va a apoyar y nos ayudara con el tema de mi tía.(can no sabía que cara poner, era imposible que su cuñada aceptara si le obligo a dejar a Kiraz, no podían hacer eso. Su relación debía ser secreta)

Can- No sé, no creo que eso sea lo mejor. Debemos esperar un poco para que todo esto sea normal. Tu tía se marchará, solo hay que tener un poco más de paciencia y todo se pondrá en su sitio.

Kiraz- Te digo que ella nos aceptara, me lo dijo, a lo mejor eres tu el que tiene el problema con aceptar lo nuestro...

Amor PuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora