omega o Alfa

Veintiocho

Era un nuevo día y el alfa había despertado gracias a los rayos de sol que entraban por la ventana, dando directo en sus ojos, haciendo que gruñera molestó y cubriera su cara, ese día estaba decidido a faltar al instituto, pues no quería tener que soportar a su hermano siendo cariñoso con su omega, pero al parecer esos planes serían arruinados por su madre.

- Min YoonGi, ya despierta perezoso ¿Acaso no piensas ir al instituto?, Ya vas tarde.-  su madre le movía con brusquedad, haciendo que el contrario se quejara.

- No molestes madre no iré. - gruñó molestó para reacomodar se en la cama.

- Nada de no iré, date prisa Min YoonGi. - jalo del cobertor que cubría en totalidad el cuerpo del Alfa, haciéndolo protestar nuevamente.

Después de unos minutos peleando con su madre, YoonGi se resignó en asistir a la escuela y en menos de 15 minutos ya estaba listo, cuando bajó observo a sus padres y hermano terminando el desayuno, su madre le llamo para que comiera algo pero simplemente le ignoro dirigiéndose directo a su auto.

Mientras tanto la madre Omega, se preguntaba la razón del comportamiento de sus hijos, como madre le dolía el hecho de que sus dos hijos no se llevarán bien, aún no lograba comprender en qué momento se comenzaron a  detestar de esa manera, si ambos fueron muy unidos cuando eran niños.

[...]

Él omega habían llegado al instituto en compañía de su hermano como cada mañana, solo que está vez no se sentía entusiasmado por asistir a clases, aún sentía sus ojos hinchados debido a tanto llanto, pero según su hermano no se veían tan inflamados.

Al llegar al colegio pudo ver qué estaban ya todos sus compañeros, pero no pudo evitar dirigir su mirada al asiento vacío de YoonGi, segundos después su mirada fue bloqueada por el cuerpo de JiHoon.

- Jiminnie, ¿Cómo te sientes?.- pregunto con tono meloso.

- Bien. Estoy bien gracias. - le dedicó una fingida sonrisa.

- Me alegro por eso. - se acercó con intenciones de besarle pero el timbre sonó interrumpiendo el momento.

Él alfa gruñó molestó mientras Jimin soltó un leve suspiro de alivio, pues pudo sentir la mirada pesada de JiHyun puesta el él.

La clase comenzó, y Jimin seguía mirando de vez en cuando al lugar vacío de YoonGi, se preguntaba si estaba bien,no fue hasta después de media hora que la puerta fue abierta interrumpiendo al profesor.

- Joven Min, ¿Qué hora es está de llegar?. - pregunto con evidente molestia.

- Lo siento, me perdí en el sendero de la vida. - sonrió ladino al ver la cara de indignación del profesor y escuchar a sus compañeros reír.

- Tomé asiento ya joven Min. - le indico el profesor, rodando los ojos al mismo tiempo que hacía ademanes para callar a su clase.

Jimin al verlo sonrió, se alegraba de que estuviera bien físicamente, pero al ver su semblante decaído sabía que se encontraba igual que él de dolido, por un momento pensó en lo dicho por su hermano el día anterior, así que decidió hacer lo que se le sugirió.

[...]

Termino finalmente las primeras clases y era hora del almuerzo, el omega fue casi arrastrado por JiHoon, impidiéndole poder acercarse a YoonGi.
Él alfa solo observaba como su omega era llevado de la mano por su hermano, una vez estos salieron de su campo de visión soltó un suspiro dejando caer su cara entré sus manos.

- Hey Min, relájate y vamos por mi hermano. - le llamo JiHyun, haciendo que levantara el rostro y lo mirará.

- ¿Lograste hablar con él ayer?.- dijo sin ánimos, en casi un susurro.