A Tu Lado / Auronplay [Terminada Y En Edición]

31 - Un problema tras otro

Hola! Primero quería comenzar agradeciéndoles todo el apoyo y cariño que me dáis tanto a mí, como a la historia ❤️ realmente jamás imaginé que  leerían 1k de veces, y mucho menos 8 ni 9k. Sigo flipando. Y todo se los debo a ustedes, enserio muchísimas gracias por todos los comentarios, consejos, ayuda, etc. Estamos actualmente en el puesto 4 del ranking de Auronplay, y eso para mí es un gran logro. Espero que sigan disfrutando leyendo tanto como yo me la pasó escribiéndolo. Muchas veces me plantee dejar la historia a medias, ya sea por vergüenza o temor a qué dirán. Pero ahora, que veo el resultado y amor que me brindan día a día, desaparecen mis dudas. Bueno, ya es mucho texto. Perdón pero era muy necesario agradecer por todo. Desde ya, muchisimas gracias y... Comenzamos!

Narra Vicky : Un año de novios.

Estábamos en la casa de la madre de Raúl, por una cena en familia. Era la primera vez que cenaba en compañía de la familia completa de él.

— Laura pásame ese vaso porfavor - le indicó Raúl sentado en el sofá mientras servía las bebidas. El ambiente era algo festivo, se escuchaba de fondo una música de Michael Jackson, además que habían puesto luces coloridas por las paredes.

— Claro - ella le pasó el vaso y se dirigió a su madre — ¿Cuando llegará Rubén? - Silvia estaba sacudiendo unos trapos para luego doblarlos perfectamente sobre el mármol.

— En unos minutos tal vez, me acaba de mensajear – me observó — tú siéntate reina, ya me has ayudado mucho.

Me le acerqué y le quité los cubiertos de las manos
— No sé preocupe señora Silvia, déjeme que ponga la mesa - le sonreí.

— ¿Mamá vas a tomar? - preguntó Raúl sirviendo vino

— Su presión señora - le indiqué viendo de reojo a mi pareja — no es conveniente que beba alcohol.

Ella sonrió
— La chica tiene razón Raúl, al parecer ella me cuida más que tú.

Él hizo una mueca de indiferencia
— "Illi mi cuidi mis qui ti" - dijo con la voz aguda — Si claro, pero... ¿Vas a tomar el vino o no?

Puse los ojos en blanco.

( . . . )

Al cabo de media hora, llegó el hermano de Raúl. Rubén Álvarez.

— Hola buenas – saludó entrando en la casa con un aspecto intimidante. Era como Raúl, pero sin aspecto de bonachón ni carismático; él tenía pintas de ser un mafioso vende porros.

Raúl me había hablado pocas veces de él. Y ya me hacía una idea del porqué.

Madre mía...

— ¡Hijo! - exclamó la madre sonriendo y yendo para abrazarlo - tanto tiempo sin verte. ¿Cómo has estado?

La mirada de Rubén pasó de su madre; a Raúl, y luego a mí... Por lo visto intentaba intimidarme con su mirada, pero no lo iba a lograr tan fácil.

— Ajá, si, yo también te quiero - dijo neutro observándola — Raúl.

Él se levantó del sofá y fue directamente a abrazarlo cortésmente mientras se daban unas palmadas cortas en la espalda.

— Rubén - dijo de la misma manera. Se hizo a un costado dejándome a la vista de su hermano, haciendo que un leve rubor apareciera en mis mejillas - ella es Victoria, mi pareja.

Nos quedamos unos incómodos segundos en silencio, mientras él me analizaba de arriba a abajo, haciendo que me ponga nerviosa; tanto que para calmarme tuve que acercarme a Raúl y entrelazar mi brazo con el suyo.