﹝finale﹞

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— ¿Minho?

El mayor no había dicho nada, solo había bajado la cabeza para jugar con sus manos desde que los demás se fueron. Jisung tenía tantas preguntas, y Minho no sabía cómo responder.

— ¿Por qué fingiste salir con Chan?

Pero esa era la pregunta que más lo tenía confundido. Si tanto lo quería cómo decían, ¿por qué hizo aquello?

— Porque te quiero.

— Eso no tiene sentido.

— Porque te quiero, y no soportaría que te juzgasen por estar conmigo. Jisung, tus padres me quieren, pero solo porque creen que soy tu mejor amigo. ¡No les haría ni pizca de gracia que su hijo fuera homosexual y saliese con el chico desolado de la ciudad! Fingí salir con Chan porque sabía que esa era la única forma de alejarnos.

— Minho...

— Hannie, déjame terminar. Sé que no es importante, pero no quiero que te traten diferente por... cómo seas. Sé que no vas a cambiar de orientación por dejarme ir, pero quizá conozcas a una persona mejor, una persona que pueda hacerte feliz, una persona con una familia estable que te acoja al cien por cierto, que no te avergüencen por estar con el hijo de la suicida y el maltratador. No quiero que te juzguen por mi familia, no sabiendo lo que se siente.— en cuanto terminó de hablar, levantó la cabeza, viendo al menor tomar sus manos entre las suyas para entrelazarlas sobre la mesa.

— Minho, ¿crees que me importa lo que digan los demás?— cuestionó, acariciando con su pulgar la piel del contrario.

— Jisung... No quiero que te juzguen, no soportaría saber qué es mi culpa y que no puedo evitarlo.

— ¿Esa gente me va a servir de algo cuando no te tenga conmigo? No me importa si hablan a nuestras espaldas sobre mí, no me importa lo que piensen mis padres. Te quiero, y a la única persona que necesito para ser feliz es a tí, Minho.— hizo una pausa y retomó la palabra.— Si esa era tu razón para no estar conmigo, ya no la necesitas más. ¿O es otra cosa...?

Minho se apresuró a negar, aún sin convencerse del todo. Soltando la mano del chico, tomó su rostro con sus manos, mirándole fijamente.

— Prométeme que no dejarás que los comentarios te afecten, y si lo hacen, pegaré a-

— No hará falta acudir a eso, no te dejaré ir.— con una sonrisa, puso sus manos sobre las del mayor.

— Entonces... Han Jisung, ¿quieres-?

Y Jisung, harto de esperar, unió sus labios como respuesta, besándolo con delicadeza y pasión al mismo tiempo.

— Quería crear un momento cursi, y así me lo devuelves.

— ¿Te molesta?— enarcó una ceja, soltando una suave carcajada al ver al mayor negar efusivamente.

— Te quiero, Jisung.

— Y yo a tí, Min-

— ¡Por fin! ¿Podemos ya sentarnos a comer? Tenemos la comida desde hace cinco minutos y os estabais enrollando con la charla.

— ¡Hyunjin!— Seungmin apareció detrás, tomando el brazo del mayor para arrastrarlo con él.— Siento si interrumpió algo, pero estáis tardando.

— Bueno, ya lo habéis jodido, así que venid.

Hwang se sorprendió ante la respuesta de su mejor amigo, que en otras circunstancias lo habría golpeado por estropear un momento tan importante. Pero Minho estaba de muy buen humor como para que eso lo afecte.

Minho se cambió de sitio para sentarse junto a su ahora pareja, viendo como el resto llegaba. Felix también se unió a ellos, siendo su comida pagada por Jisung, que se quejó, ya que al final no le había servido por el hecho de que Chan conocía a todo el mundo.

El ambiente que se formó en esa segunda parte de la reunión era totalmente opuesto al que había cuando recién llegaron, y todos disfrutaron.

Mientras los demás reían de un chiste que contó el australiano mayor, Minho se abrazó al menor, estrujándolo entre sus manos mientras el contrario acariciaba su cabello.

— Hannie, gracias por existir.

— También te quiero, Minho.

Por fin estaban donde debían estar, y eso era lo más importante.

Porque su finale era y siempre será estar juntos.

﹝fin﹞

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