¿Te perdí, Tae?

Prólogo

-¿Tae?- 

-Jimin, ¿qué sucede?- dejó de lado los papeles que revisaba sin mucho esfuerzo.

-¿No piensas ir a comer?- Jimin se sentó frente a él.

-No, tengo trabajo pendiente y prefiero adelantarlo-

-¿No quieres que te pida algo?- sonrió leve.

-No tengo hambre, mejor ve a comer tú, te estoy quitando tu tiempo-

-Pero llevas sin salir a comer desde hace dos semanas-

-No creo que hayan pasado tantos días-

-Tae... ¿estás seguro que estás bien?-

-¿Por qué preguntas eso?- frunció el ceño.

-¿Sabes que no puedes engañarme?,  ¿me vas a decir?-

-Jimin...-

-Yo ya sé qué sucede, todos los sabemos desde hace mucho, pero te hemos dado tu tiempo para ver qué piensas hacer, pero lo único que vemos es como te vas apagando poco a poco- Taehyung lo miró con sorpresa- ¿por qué sigues soportando lo que él hace?-

-No lo sé-

-Lo ha hecho muchas veces, tú no mereces pasar por esto-

-Creí... creí que si esperaba más tiempo... todo mejoraría-

-Tae, no lo va hacer, él no va a cambiar por más tiempo que le des, a quién sí le debes de dar tiempo y atención es a ti, mira cómo te a afectado, sufres cada día-

-Pero es que yo lo amo-

-Te juro que esto me duele, pero debo decírtelo, él ya no te ama, si lo hiciera no estaría buscando a nuevas personas-

-¿Qué fue lo que hice mal?- los ojos de su amigo se nublaron.

-Tú no hiciste nada mal, fue él-

-Yo no sé qué hacer-

-Alejarte-

-Sabes que un divorcio...-

-Lo sé, pero toma tu espacio, no te digo que te vayas de viaje porque justo ahora hay demasiado trabajo, pero debes tomarte tu tiempo para meditar lo que quieres que suceda, porque justo ahora con tu estado emocional, un divorcio sólo te haría más daño-

-Jimin- negó y una pequeña lagrima recorrió su rostro.

-Si necesitas donde quedarte puedes hacerlo en mi casa, Yoon no se va a molestar-

-¿Puedo pensarlo?- 

-El tiempo que necesites, yo sólo quiero ver a mi Tae feliz de nuevo-

:::::

Abrió la puerta de su casa encontrándola a oscuras por completo, lo que quería decir que su esposo aún no llegaba, miró su reloj para comprobar que eran cerca de las once de la noche, él había salido tan solo hace una hora de su oficina, él estaba seguro que todos ahí ya habían salido incluido él.

-¿Otra vez no piensa ni siquiera llegar a dormir?- le preguntó a la nada.

Con pasos lentos se dirigió a la habitación que ambos compartían, pero que en los últimos meses parecía más su habitación. Con duda abrió la puerta, sintió como una corriente de frío recorrió su cuerpo cuando notó lo solo que estaba.

-Tienes razón, Jimin, esto solo me lastima cada vez más- se sentó en la orilla de la cama viendo hacia al frente, debía pensar qué iba hacer. ¿En serio todos esos años habían quedado en el pasado y perdidos? Todos esos días de risas e ilusiones sólo habían quedado en el recuerdo de uno de ellos. ¿Él debía seguir viviendo así?. N, no debía, pero iba a darle un oportunidad más, eso definiría que haría.

¿Dónde estas? 

Fue el mensaje que le mandó con la esperanza de que fue contestado. Si él respondía, se quedaría junto a él el tiempo que fue necesario, porque su respuesta implicaría que aún un poco de su atención le pertenecía. Rogaba por que contestara. 

::::

-¿Tae?- preguntó cuando contestó la llamada- ¿estás bien?- recibir una llamada en la madrugada no era normal.

-Lo siento, sé que no son horas, pero dijiste que podía venir aquí- 

-¿Dónde estás?- Jimin ahora estaba despierto por completo y con su mano tocó el hombro de Yoongi para despertarlo.

-Fuera de tu casa- 

-Espera ahí, voy a abrirte- salió casi corriendo de la cama.

-¿Qué sucede?- 

-Tae está fuera, algo debió de pasar- no esperó a que su esposo se levantara.

-Hola- lo saludó cuando abrió la puerta- lo siento, sé que no son horas, pero ya no podía estar más ahí-

-No, no Tae- se acercó a su amigo para poder abrazarlo- yo te dije que podrías venir- le rompió el corazón sentir como se aferraba a él sin poder contener su llanto- ¿qué sucedió esta vez?- 

-Ya no puedo...- sollozó.

-Lo siento tanto, cariño- 

-Hey, deberían entrar, hace frío- 

-Tae, Yoongi tiene razón, te puedes resfriar, vamos adentro y ahí podrás contarnos todo-

-Sí, yo...-