Y pues si ahí estaba yo, feliz olvidando que no todo suele ser perfecto y que mi vida ya tomaría otro rumbo... Prometí amarlo respetarlo estar con el en las buenas y en las malas, implicaba la salud la enfermedad los problemas las alegrías y sin darme cuenta prometí luchar siempre por nuestro amor... Al fin el padre dijo lo de siempre y besar a la novia. Yo no me lo creia. Al besarlo subía al cielo y su mirada me daba tanta seguridad. Todos nuestros amigos y familiares nos felicitaban con un abrazo. De ahí nos fuimos a la recepción todo fue como cualquier chica lo soñaria.y como era de esperarse esa noche viajamos a san Andrés islas a nuestra luna de miel.