Recuerdo ese día.
No el día en el que todo se fue a la mierda no ese no, más bien el día que nos vimos por primera vez, y tampoco hablo de la noche que intercambiamos números.
Me refiero a ese día en el que llegaste a mi graduación de preescolarHabian pasado solo tres días desde que te mudaste y mi mamá no dudó en invitar a los nuevos amigos que estarían de ahora en adelante en este pueblo. Siendo sincera no me extrañaba que lo hiciera, ése era su don. Claro está que ser una amable extrovertida no estaba en mis venas como tampoco lo estaba organizar fiestas e invitar a cuantos se me cruzaran.
Por eso, es que ése día llegaste a mi casa junto a tus padres ignorando a todo niño que se te acercaba a no menos de un metro de distancia.
Eh de decir que eras bastante raro, pero supongo que eso me hizo poner mis pequeños ojos de niña en ti.
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Todo se complica cuando alguien se enamora
Short StoryNuestra historia empezó así... Con un baile, una charla y gomitas de aperitivo. No sabía lo que vendría después. Aunque debí preveer una solución para lo que se avecinaba. Por suerte escribí en mi diario todo lo que tu y yo pasamos, hasta ese día...