Capítulo único.

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12 de Enero de 2015, Seúl, Corea del Sur.

—Uno, dos, tes, cuato… ¡Nueve, diez! ¡Kyusoo, voy po ti! —

— ¡No Jonin, eso es tampa! —

El pequeño de piel blanca comenzó a correr perseguido del moreno y ambos repartían risas infantiles y agitadas.

—Soo…— El moreno mordía su labio inferior con fuerza, apretó los puños y cerró los ojos.

— ¡Kyusoo espeda, ya me cansé! —El pequeño castaño oscuro se apoyó en sus piernas e intentaba recuperar aire.

— ¿Jonin está bien? —El castañito se acercó a velocidad junto al pequeño con preocupación y se agacho para verlo mejor — ¿Jonin? —

El morenito no dijo nada y eso le alarmo aún más al blanquito.

— ¿Jonin se tiente mal? — El castaño oscuro sonrió a sus adentros y abrió un ojo para ver al castañito preocupado con sus ojitos a punto de dejar caer lágrimas.

Cuando Jongin vio el momento correcto, lo sujeto del brazo para atraerlo a su pequeño cuerpo pasando sus brazos por el cuello del bajito mientras que este se sonrojaba al contacto.

—Kyungsoo…  — El castaño oscuro abrió los ojos, apenas formulaba sus cortas palabras, el nudo en su garganta le impedía hablar amenazándolo con dejar caer sus saladas lágrimas. Sus ojos volvieron a cerrarse.

—Jonin quiede a Kyusoo, lo quiede mucho—Kyungsoo ya había correspondido al abrazo pasando sus cortos brazos en la cintura del moreno.

—Jonin quiede a Kistal— El pequeño labio inferior del castaño temblaba acompañado de sollozos.

Jongin se apartó de él y tomo con delicadeza el rostro del castañito.

—Jonin quede a Kyusoo, sólo a Kyusoo— Con los dos pulgarcitos limpiaba las lágrimas que salían del bajito.

—Prometimos que siempre íbamos a estar juntos…— Escuchaba llantos alrededor y el color negro en sus ropas le dolía aún más.

Las personas se alejaban en dos, en tres o en un grupo para regresar a sus hogares con semblantes tistes, mujeres lloraban por la lastimosa perdida pero no como Jongin lo hacía, no como el moreno sufría.

— ¡Jongin, veamos juntos pororo! — El chiquillo saltaba de emoción frente al televisor sin apartar la vista de él.

Loves deceased.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora