Novia controladora

3

Lisa caminaba hacia la puerta de su casa esperando ser recibida por su linda novia, pero lo único que oía eran las voces de su mamá y su novia.

Enfurecida camino hacia donde provenían las voces logrando así poner nerviosa a Jennie.

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_ A-amor... perdón no te sentí llegar.

- No te preocupes nena

Aquella chica hizo una sonrisa que le puso los nervios de punta a Jennie haciendo que su cuerpo temblará un poco.

- ¿Ya le ofreciste algo a madre?

- Lo siento.. yo...lo olvide.

Le hizo una mirada amenazadora mientras Jennie solo volteaba la cara evitando verla a los ojos.

- ¿¡ Y que esperas para ir a traerle algo !?

- ¿ Que se le ofrece señora Manoban ?

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En los ojos de aquella chica se reflejaba el temor.
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- agua me parece bien

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Aquella señora no se percataba de las señales de abuso que la chica peli-castaña daba.
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- Hija, ¿no crees que te pasaste con Jennie?

- No, así es cómo se debe de tratar a la pareja ¿ Acaso no era así cómo te trataba papá ?

La señora bajo la cabeza dejándolas en un silencio incómodo.

- Aquí está su agua señora.

- Gracias Jennie, pero yo creo que mejor me voy retirando.

- pero si acaba de llegar seño-...

- Déjala que se vaya si quiere irse.

-per-...

- ¡ Qué parte de que la dejes irse no entiendes !

- Lo siento.

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¿ Por qué siempre tengo que ser yo la que pida perdón ?
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Jennie sintió cómo un dolor invadía su brazo, mientras Lisa hacia más fuerte su agarre.

- No te cansas de ser una mala novia, nunca debí haberme juntado contigo.

Escupió esas palabras de una manera seca y dolorosa, para la pequeña castaña fue la gota que colmo el vaso para gritarle
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Oh mala decisión
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- ¿¡ Entonces por qué no te buscas a otra persona y me dejas a mi libre!?

Un golpe aterrizó sobre su mejilla logrando voltear su rostro, sus ojos comenzaban a cristalizarse pero intento mantenerse fuerte.

- ¿¡ Eso es el lo que quieres cierto !? ¡ Que te deje para que puedas estar de zorra sin preocupación!

Otro golpe.

- !O acaso crees qué no noto cómo miras a todos!

Otro golpe.

- ¡Eres una resbalosa! Pero a mí nunca me vas a poner los cuernos entendiste ¡¿ Entendiste ?!

No aguanto más y rompió en llanto.

- Pero mira lo que me hiciste hacer, no llores bebé sabes que esto lo hago por tu bien y por el bien de nuestra relación.

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Una relación que mataste hace tiempo atrás...
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