CAP. 15: Aquel día

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04/Abril/2023

Narra Valt Aoi

Mi padre rento un camión de mudanzas grande para que todos nos fuéramos juntos de camino a nuestra nuevo hogar y pudiéramos convivir y lo más importante para que todas nuestras cosas cupieran bien dentro del camión y no se necesitará hacer dos viajes, ya que era un viaje de un día entero y sobre todo cansado.

La casa se veía vacía al estar ya todos los muebles dentro del camión, solo faltaba meter las cajas para verla completamente vacía, me puse algo triste por ver todo empacado.

Mientras acomodaba algunas cajas pensaba en Shu y el beso que me dio ayer, deseando que volviera a besarme así y poder sentir sus cálidos labios, el que me abrazara por lo cintura y que volviera acariciarme como ayer.

Mi mente divago pensando en lo que pudo surgir de aquel beso y del tiempo que perdí al no haberle confesado antes a Shu cuánto me gusta.

Mi madre me llamo con alegria, yo algo extrañado por ese tono alegre le conteste, esperando alguna buena noticia como que quizá no nos fuéramos a mudar y desempacaramos todo.

- Adivina quién vino a ayudarte a cargar las cajas - me dijo mi madre feliz, me desanimé al no escuchar que se cancelará la mudanza.

Al ver qué mi Madre estaba alegre pensé que podría ser Daigo quien hubiera venido a ayudarme, hasta que vi entrar a Shu y me emocioné tanto que corrí a abrazarlo.

-- Hola Valt - me saludo Shu abrazándome también.

- Bueno niños los espero afuera, voy a seguir acomodando algunas cajas - nos dijo mi madre saliendo de la casa y llendo hacia el camión.

Abrace fuerte a Shu y él solo acarició mi cabello cuidadosamente, hasta que lo solté al escuchar un quejido de él al abrazarlo más fuerte.

- Y... ¿Cuantas cajas aguantas? - le pregunté a Shu para romper el silencio.

- Creo que puedo aguantar dos cajas sino son tan pesadas - me sonrió algo nervioso.

- Pues podemos cargar las cajas que tienen ropa adentro, no son muy pesadas y podemos cargar dos cajas - comenté y rasque mi cabeza también nervioso, ya que, me sentía extraño al estar solos nosotros dos despues de habernos besado, apenas ayer...

Yo me puse a cargar algunas cajas y Shu hizo lo mismo, los dos nos mirábamos de vez en cuando, a la hora de cargar las cajas y llevarlas hacia el camión, no podía evitar soltar algunos suspiros cuando veía a Shu distraído porque se veía muy guapo, pero cuando me oía suspirar y me volteaba a ver yo miraba hacia otro lado con vergüenza y seguía cargando cajas.

Ya todo estaba dentro del Camión, y antes de irnos comimos todos junto con Shu, iba a ser un largo viaje y mi madre quería que nos fuéramos bien comidos y así fue, ya que Shu nos trajo albóndigas con espagueti, estabas tan deliciosas que nos acabamos todo el Tupper donde Shu trajo las albóndigas y pareció entender de dónde saque lo glotón que soy.

Antes de irnos nos despedimos de Shu y cuando me tocó despedirme de el, lo abrace muy fuerte, Aprisionado lo entre mis brazos sin que se pudiera zafarse e hice mi berrinche por no quererme ir, no pensaba soltarlo por ser nuestro último abrazo hasta el momento y quería quedarme así.

- Valt, no te pongas así, aún estoy aquí contigo - trato de calmarme Shu - No me abraces tan fuerte o me dejaras sin aire - bromeó riéndose.

- O le romperas los huesos - comento Toko.

- No... no quiero irme - solloce sin dejar de abrazar a Shu - No quiero irme a otra ciudad donde nadie me conoce y dónde ya no los pueda ver - dije para después esconderme en su pecho.

- Valt, quien no quisiera ser tu amigo, cuando llegues a tu nuevo hogar habrán chicos que querrán conocerte y que les enseñes a ser mejores Bladers - me animo Shu.

- No me importa yo solo quiero estar con ustedes, ¡Quiero quedarme! - alcé la voz para romper el llanto - Quiero quedarme para competir en el torneo que viene - y seguí llorando a mares, se que fue incómodo tener que soportar mi berrinche pero ya no quería irme.

En eso llegaron Wakiya con un pastel en sus manos, Rantaro y Daigo, que al verme llorar así, no se acercaron porque no querían formar parte de tan vergonzosa escena. Por otra parte Shu seguía consolando me para que me calmará.

Cuando por fin terminé de llorar solté a Shu y me disculpe con el, Wakiya se acercó a entregarle a mi madre el pastel que traía y se despidió de todos nosotros, y esto mismo hicieron Daigo y Rantaro tristes por supuesto.

Mi Padre se subió al camión junto con mis hermanos y mi Madre, solo faltaba yo, me quité mi diadema y se la di a Shu.

- Espero con esto me recuerdes hasta que regrese - limpie mis lágrimas y lo miré, Shu saco se su bolsa una pequeña caja y la abrió para darme una pulsera roja con cuentas azules que cambiaban de tono dependiendo de la luz, cuando me la puse por última vez lo abrace y no solo a él sino también a mis demás amigos y mis grandes rivales.

- Cuando regrese espero sean los mejores bladers - les sonreí tratando de que la voz no se me quebrara tanto al hablar, todos asintieron y Rantaro me entrego una hoja de papel con sus números para que siempre estuviera en contacto con ellos, después de esto me subí al camión junto con miles familia y partí hacia una nueva ciudad a comenzar una nueva vida.

Los iba a extrañar mucho, y fue menos difícil despedirme al verlos calmados tras mi partida, y se que todos aguantaron las ganas de llorar para no hacerme sentir peor, pero por el retrovisor vi como agachaban la cabeza y vi como Shu con su brazo se cubrió el rostro para que no lo vieran llorar mientras que Daigo le daba algunas palmadas en la espalda, dándose la vuelta para irse, odié irme lejos y no poder regresar pronto, pero cuando pudiera volvería y esta vez si aprovecharé el tiempo que pueda para estar con ellos.


Ya se terminó de editar los capítulos publicados hasta el momento y subiré 4 capítulos para darles un importante adelanto de la historia.

Espero que estén disfrutando el fanfic!

ATTE: Persefone de Antares


06/abril/2023

Fecha de publicación:
11/Abril/2023

Palabras escritas:1073

ERRORES | ShuxValt | Beyblade BurstDonde viven las historias. Descúbrelo ahora