La culpa no es de ella,
solo es cuestión de azar y de saber escoger...
No comas de ese árbol, dijeron.
Pero vino el engaño reptando
y la sedujo con sus palabras bifurcadas.
Por qué la serpiente no lo escogió a él?
Se preguntarán muchos.
Por qué tuvo que escogerla a ella?
A ella, que ahora tiene que soportar esa enorme carga.
Esa carga que hiere su dulce corazón,
Por qué no lo escogió a él?
La respuesta es simple...
Él es sordo como un jardín secreto
y su corazón es duro como las rocas qué se amontonan en las murallas...Buenos Aires 03/03/2020