Día 6 (+18)

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Tema: Skin Marks

Título: Caminos Cruzados p.2

Notas: Esta historia es la continuación del día 2. Por si alguno desea releerlo antes de este.

Advertencia: Contenido Sexual (+18) leer con discreción.

...

A veces hay que hacer cosas de las que no nos enorgullecemos, por un bien mayor.

Aquella frase la había escuchado hace dos años aproximadamente.

- ¡Ahh! – su gemido hizo eco en el solitario vestidor.

No le dio importancia a su significado. En ese entonces para él, cualquier acción que saliera del parámetro legal, era mala.

-Ka-Kazemaru... - jadeó su nombre, mientras mantenía el acelerado ritmo.

Era sorprendente qué tanto podía cambiar la mentalidad de una persona. Del atletismo al fútbol, del Raimon al Instituto Imperial.

-Mmmasssss... - suplicó aferrándose a su espalda, estaba forzando sus pulmones a rogar aún cuando no le estaba llegando el suficiente aire- ¡Aghmmmmm!

El proceso es más importante que el resultado.

¿Cuándo dejó de tener relevancia algo tan significativo?

-Esss...tás... gritando. – Fudou selló sus labios evitando que alzara la voz.

Tal vez no dejó de importarle... solo comenzó a aparentar que lo hacía. Tal vez seguía las órdenes de Kageyama Reiji, porque sabía que él no tenía la suficiente fuerza para guiar solo al Instituto Imperial.

-Mng... ¡Agh! – separándose de los labios contrarios, buscó desesperado aire – Y-ya... ya... ss-se fueee... ¡se fueron! - no lograba coordinarse bien. Su cuerpo y su cabeza estaban en dos puntos diferentes del limbo.

"¿Qué significa esto? ¿Estás de su lado?"

"No creí que te convertirías en el perro de Kageyama."

"Kazemaru ¿Cómo puedes estar de acuerdo con esto?"

"Eres un traidor."

"No podemos confiar en él."

"Siempre fue plan del comandante..."

Su cuerpo ardía con cada penetración, su mente se nublaba con cada beso, su cuerpo dejaba de ser suyo en cada caricia, un extraño sentimiento de pertenencia crecía por cada marca dejada en su cuerpo.

-Fud-fudouu... ¡Fudou!... ¡Haaaa!... ¡Fudou!- gemido a gemido llamaba por él. Lo que comenzó hace dos años en una noche de tormentosa solo con besos, estaba buscando su climax en la tranquilidad de los vestuarios luego de un partido de fútbol.

¿Qué estás haciendo Kazemaru? La misma pregunta de hace dos años, regresaba para atormentarlo.

-Así... - lo felicitaba – Muévete... ¡tsk!... como quieras... - las rasposas manos presionaban en su cadera ayudándolo a subir y bajar. Estaba perdido en el placer. Estaba perdido en Fudou.

¿Cómo había terminado así? Escondido con Fudou Akio, teniendo sexo en las frías bancas de los vestidores del club de fútbol.

- ¡Más! – gritó cuando sentía que no era suficiente - ¡Gh! ¡Ahh!

¿Cuándo soltó las ilusiones de niño? ¿Cuándo dejó de importarle la idea de que la primera vez sería con una persona que amara y solo luego de años de relación estable?

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