POV MELISSA.
—Amor, estoy aburrida— Karina llevaba todo el día en el maldito celular sin prestarme atención, ¿qué puede ser más importante que el amor de su vida? O sea yo.
—¿Y qué quieres que hagamos? Te dije que si querías salir y dijiste que no tenías ganas cariño—Respondió Karina tomando asiento a mi lado.
—No sé, perdón, es que en verdad no tengo ganas de salir—Posicione mi cabeza en su hombro izquierdo.
—Ya sé, podemos ir a comprar helado y vemos algo, ¿te agrada bebé?—Volteó quedando frente a mí de manera diagonal en el sofá.
—No quiero saliiiir—Reconozco que soy una novia un tanto caprichosa.
Karina sonrió, la realidad es que ya estaba acostumbrada a mis berrinches y es que, a decir verdad, le gustaba consentirme.—¿Entonces preciosa?—Puso sus manos en mi cintura haciéndome caer de espaldas para posicionar medio cuerpo de ella encima de mí.
—Karina...—Hace 2 semanas que no teníamos relaciones sexuales, no porque no lo quisiéramos, si no porque habíamos estado algo ocupadas con los estudios.
—Sí, amor, ¿qué pasa?—
Comenzó a besar mi cuello y a acariciar mis piernas por encima de mis jeans a la par.—Karina...—Dije en un susurro cuando subió mi camisa y comenzó a besar mi abdomen, muy en el fondo de mi ser, estaba algo molesta porque en todo el día le había prestado más atención a su maldito teléfono que a mí, así que, es mi turno de hacerla esperar por mí.
Poco a poco fue subiendo mi blusa hasta sacarla y dejar mi torso a la vista y con mi sostén solamente cubriendo mis pechos. Llevaba un encaje negro, me gustaba usar ese tipo de lencería cuando estaba con mi novia porque sabía que eso la volvía vulnerable ante mí.
—Maldita sea Melissa, eres tan sexy, me fascinas—Estaba excitada y lo podía escuchar en su voz.
Me levanté quedando a horcajadas de Karina dejando mis pechos aún cubiertos por el sostén sobre su rostro. Los miraba tan ansiosa y he de decir que eso me calentaba demasiado. Tomó mis caderas y presionó mi cuerpo contra el suyo a la vez que besaba mi cuello de una manera brusca pero excitante.
Desprendí cada botón de su camiseta dejando a la vista ahora sus pechos y su torso desnudo, llevaba puesto un sostén rojo pasión que me hizo perder la noción del tiempo de manera repentina. Puse mis manos en su rostro y bese sus labios de manera necesitada, abrió su boca recibiendo mi lengua al igual que yo recibía la suya, comencé a mover mis caderas de manera lenta pero haciendo presión, enredé mis dedos en su cabello castaño un tanto largo y la acercaba cada vez más a mí. Cuando el beso comenzó a subir de nivel, dejé de hacer movimientos con mi cadera y aleje mi rostro apenas unos centímetros del de mi novia ansiosa.
Se acercó para seguir besándome y yo seguí alejando mi boca de manera lenta y provocativa con nuestras frentes juntas, cuando estaba por resignarse la volví a besar a la vez que tiraba de su labio inferior.Volvió a tomar mis caderas y comenzó a presionar mi cuerpo sobre el de ella de manera salvaje y constante, comenzaron a salir pequeños gemidos de mi boca cada que lo hacía, maldita sea, el sexo con ella siempre ha sido fabuloso.
Cuando estaba por quitar mi sostén con sus manos, la tome de las muñecas y dirigí mi boca a su oído.—¿Piensas que vamos a tener sexo después de que me ignoraste casi todo día?—Dije de manera baja e intentando sonar sensual, lamí el lóbulo de su oreja y lo mordí—Pues no cariño—Bajé de ella y busqué mi blusa.
—Oye ven, ¿en verdad me vas a dejar así?—Su voz era algo agitada y entrecortada.
—Tú me ignoraste—Me puse la blusa y salí hacía la cocina.
Escuché a Karina quejarse lo que hizo que una pequeña risa saliera de mi.
ESTÁS LEYENDO
Seducción-Oneshot.🔥
Short StoryLa sensación de la excitación es tan maravillosa cuando es con la persona que más amas, ¿no?